En Argentina, tener algún pariente que llegó de los barcos es casi tan común como que te guste el mate.
Entre las guerras mundiales los inmigrantes europeos venían para Argentina escapándose del hambre. Y sin quererlo, tanta mezcla de franceses, italianos, alemanes y españoles, dió como resultado una cocina local que tiene lo mejor de cada país. Y dulce de leche encima.
Entre estos europeos con sus recetas, llegó mi nonna Masarotta, que entre un montón de cosas, me dejó esta receta de pimientos fritos.
Siempre que la cocina pienso en todo lo que viajó esta receta y en mi nonna y mis tías todas calabresas. Así que siempre me hace muy feliz hacer estos pimientos fritos.
Me puse sentimental, a por la receta!
sobre esta receta de pimientos fritos
No vayan a confundirse a los pimientos fritos con los pimientos o morrones en conserva. Esta receta es distinta. Tampoco confundir con tomates verdes fritos, eso es una película.
Los pimientos fritos son lo mejor que le pueden pasar a una tostada. De verdad, los tienen en la heladera, tostadita, quesito crema si están gourmets, y pimientos fritos. Si no te sentís en el paraíso te devolvemos el dinero.
También me encantan para poner encima de una pizza por ejemplo. Masa, queso, y pimiento frito. Tachame la doble.
No todo es masa para estos pimientos fritos, van geniales con un pescado también y ni hablar de una sopa de calabaza bien cremosa con estos morrones encima.
Ya sé, se están volviendo locos.
Los dejo con la receta!
Saludos y hasta la próxima
Juanita
Asistente
Ingredientes
para un frasco generoso nivel nonna tana
1 kg. de pimientos morrones rojos
2 tomates
4 dientes de ajo
1 cdita. de orégano
Sal, pimienta, Aceite de oliva
Receta de pimientos fritos
dale gracias a las migraciones pibe!
1. Lavar los morrones y cortarlos (con cuchillo o con las manos) en trozos grandes.
2. Colocar los morrones en una sartén grande con un poco de aceite de oliva a fuego fuerte. Removerlos y cocinar así unos 5 minutos.
3. Pasados estos 5 minutos, bajar el fuego a medio, poner un poco de sal para que se ablanden. Los cocinaremos así unos 15 minutos más. Mientras tanto, en la baticueva…
4. Pelá y cortá los tomates en trozos grandes y los ajos en láminas finas.
5. Pasados los 15 minutos, agregá los tomates y los ajos a los morrones, rectificá sal, ponele pimienta, orégano y tapalos. Cocinar así unos 20 minutos más o media hora. Esto depende de cómo los queramos de blandos. A mí me gustan tiernos pero todavía con un poco de cuerpo, para que se sientan crocantes.
6. Verás que el tomate suelta su jugo y la preparación se vuelve caldosa. Dependiendo de los tomates y cuanto jugo suelten, tendrás que cocinar los últimos minutos a olla destapada, para que se evapore el líquido. La idea es que queden con líquido, pero tampoco es una sopa.
7. Al retirar del fuego, dejar enfriar. Pueden guardarse en la heladera hasta 1 semana.
Así quedan
como rubíes de morrón!