Cuando este verano estuvimos por el País Vasco, me volví loca con los pintxos que había. Intentaba fijarme en todos y no olvidarme de ninguno, para luego intentar hacerlos en casa y que fueran la delicia de la familia en alguna de las celebraciones que hacemos. Pero nada más lejos de la realidad. Con la mala memoria que tengo, no he conseguido acordarme de prácticamente ninguno, así que he tenido que inventar con los ingredientes que pensaba que llevaban... Ingredientes: 2 berenjenas Paté de pato Mermelada de melocotón Tomates cherry Una barra de pan Preparación:
Cortamos las berenjenas a rodajas no muy finas y las salamos. Las dejamos durante un rato en un plato, para que "suden" y pierdan la acidez. Después de un par de horas, las rebozamos en harina y huevo y las freímos. Las reservamos sobre papel de cocina para que absorba el aceite sobrante.
Cortamos rebanadas de pan, no muy gruesas. Ponemos encima la rodaja de berenjena, una rodaja de paté, una cucharadita de mermelada de melocotón y por último, pinchamos en un palillo un tomate cherry y lo pinchamos al resto del pintxo.
Nota:
Si en lugar de poner paté ponemos foie, está mucho más bueno, aunque claro, es mucho más caro.