Hace un poco más de un año comenzaba a plantearme el compartir con "el mundo" mis recetas, mis creaciones. Lo que quizá no me imaginaba es que fuese a ser un año tan especial. Los propósitos con los que empecé el año pasado publicando esas palmeritas de canela siguen siendo los mismos: poder llegar a todo el mundo con un blog en el que explicar las recetas de forma sencilla y asequibles a todo el mundo. Eso no ha cambiado. Otras cosas sí.
Yo mismo he sido el primero en cambiar. He aprendido muchísimo gracias a todos los blogs que he ido conociendo en el transcurso de este viaje. Muchas son las personas de las que he aprendido y a las que tengo que agradecerles hoy de forma especial todo lo que han hecho ayudándome y apoyándome desde el otro lado del ordenador: Yaiza, de ¡Qué cosa tan dulce!, Noemí de Merengue y Frambuesa, Lola de Frambuesa y Caramelo, Las chachas de Cocinando con las Chachas, Juan Carlos de No solo dulces, Eli de Coulis de Limón, Mara de Mara en Gredos y sobre todo a mi amiga Montes, de Manzana&Canela, que me ha ayudado y aconsejado mucho durante este año. ¡Gracias a todos!
Pero también tengo que agradecerle muchísimo a todos los que me han apoyado y que están a mi lado: mi familia por aguantar todas mis locuras; mis amigos y amigas, por aguantar mis conversaciones casi monotemáticas; mi novia y su familia, por apoyarme y comerse todo lo que les llevaba; a Marta y Javier, de AhoraZonaMedia por brindarme la oportunidad de colaborar con ellos; a Decöcina por el apoyo y por haberme ayudado a lanzarme a nivel local; y a todos aquellos que me han parado por mi ciudad para darme la enhorabuena por el blog. Gracias a todos ellos.
Y no, tranquilos, no me olvido de todos vosotros, todos los lectores anónimos de Jaleo en la Cocina, todos aquellos que me sacáis una sonrisa cada vez que comentáis, me enviáis un mensaje para animarme o decirme cuánto os gusta el blog. A todos vosotros: ¡Gracias!
Jaleo en la Cocina sigue online y espero que sea por mucho tiempo. Quería aprovechar que cumplía un año para agradecer a todos los que me han ayudado ya que muchas veces no les agradezco lo suficiente. Es un proyecto que yo solo no podría haber sacado adelante.
Ahora toca hablar un poco de la receta de hoy. Es la mítica tarta Hummingbird, de la pastelería Hummingbird de Londres, pero con alguna adaptación. En cuanto vi la receta en el libro supe que tenía que hacerla. Esa mezcla exótica con plátano y piña me llamaba mucho la atención. Además, yo le he incorporado un poco de cacao y de coco, que le dan un toque fantástico a la tarta. Es una tarta que me ha encantado y por eso he considerado que sería perfecta para celebrar mi primer cumpleaños (¡además de inaugurar con ella la temporada navideña!)
Es una tarta muy sencilla que no requiere grandes habilidades culinarias. Además, el bizcocho es muy jugoso ya que la combinación de frutas empapan muy bien la masa y le dan un toque húmedo que a mí me encanta. Además, como veis, está acompañado de crema de queso, una de mis favoritas, lo que le convierte en una de las tartas que más voy a repetir en las próximas celebraciones. Os lo aseguro.
Y como en todas las celebraciones que se precien, en esta también hay regalos. Sí. He decidido hacer un sorteo con algunas cosas muy útiles que he encontrado en el mercado. Seguro que os encantan. Para empezar, dos libros que son casi de cabecera, uno de ellos es del que he sacado la receta: Las recetas de la pastelería Hummingbird y Cupcakes, cookies y macarons de alta costura. Además, sorteo una manopla que me encanta, colorantes, cortadores navideños, unas cápsulas navideñas, un molde para cucharas de chocolate y otro para bombones con forma de joya. Gracias a Decöcina por cedernos algunos regalos. ¡Espero que os gusten los regalos! Para participar en el sorteo tenéis que pinchar aquí. ¡Leer bien las bases por favor!
El plazo máximo es hasta el 15 de diciembre a las 23.59h, que no se os pase.
No es necesario compartir el sorteo en Facebook, pero os agradecería que lo hicierais ya que así nos conocería más gente y podría participar más gente. ¡Gracias!
Eso es todo por hoy. Espero que haya muchos participantes y que no sea el último sorteo que hago. Ahora os dejo la receta que espero que os encante.
Naked Hummingbird cake
Dificultad: Fácil
Tiempo horneado: 40 mins (aprox)
Raciones: 12 porciones
Etiqueta: Postre
Receta: Las recetas de la pastelería Hummingbird
Para la masa:
280 gr de harina
300 gr de azúcar
3 huevos
300 ml de aceite de girasol
Una cucharadita de canela
270 gr de plátanos machacados
100 gr de nueces
30 gr de cacao en polvo sin azúcar
100 gr de piña en trozos
Tres cucharadas de coco rallado
Una cucharadita de vainilla en pasta
Una cucharadita de bicarbonato de soda
Para la crema:
100 gr de mantequilla a temperatura ambiente
200 gr de queso crema (tipo Philadelphia)
250 gr de azúcar glacé
Coco rallado para decorar
- Precalentamos el horno a 170ºC.
- En un bol amplio mezclamos bien los huevos con el aceite, el azúcar y el plátano machacado, hasta conseguir una masa homogénea.
- Tamizamos la harina con el cacao, la canela y el bicarbonato de soda y vamos añadiéndolo poco a poco mientras mezclamos con una espátula.
- Añadimos la vainilla en pasta.
- Añadimos las nueces, el coco rallado y la piña y mezclamos bien.
- Mezclamos bien hasta conseguir una masa totalmente homogénea.
- Engrasamos dos moldes de 20 cm de diámetro y distribuimos la masa en los dos moldes.
- Metemos en el horno y horneamos durante 40 minutos, más o menos, hasta que al introducir un palillo este salga limpio.
- Si vemos que se nos está tostando mucho la parte de arriba, lo cubrimos con un poco de papel de plata.
- Sacamos y dejamos enfriar en el molde 10 minutos. Pasado ese tiempo traspasamos a una rejilla. Dejamos enfriar los bizcochos por completo.
- Mientras podemos ir preparando la crema. Para ello mezclamos bien la mantequilla con el azúcar glacé, hasta que esté bien unido. No deben quedar grumos de ningún tipo.
- Añadimos el queso crema, que debería estar muy frío, recién sacado del frigorífico. Batimos bine hasta que consigamos una crema casi blanca y muy homogénea. Normalmente se suele quedar parte de la mantequilla abajo. Con una espátula vamos mezclando bien de vez en cuando y seguimos batiendo.
- Cuando los bizcochos estén fríos, cortamos con una lira la parte superior de uno de ellos. Será el que vaya abajo, nos interesa que sea lo más plano posible. Si no tenemos lira podemos hacerlo con un cuchillo grande.
- Colocamos el bizcocho cortado en la base en la que vamos a presentar la tarta y echamos tres cucharadas de crema de queso encima. Lo extendemos bien con una espátula. No debe quedar perfecto, queremos conseguir un efecto "nevado" así que no busquéis la perfección.
- Colocamos el otro bizcocho encima y hacemos lo mismo.
- Yo he espolvoreado coco rallado por encima y he decorado con unas estrellas-copos de nieve echas de fondant. Parte de las estrellas las he cubierto con purpurina y otras con coco rallado, para que no fuesen todas iguales. Hay que dejarlas secar bien para que tengan consistencia y que se queden de pie.
- Servimos en frío.
¡A disfrutar!
- Hay que dejar que los bizcochos se enfríen bien porque si no la crema de queso se derretirá.
- Es recomendable hacer las decoraciones de fondant un día antes, para que se queden duras.
- La receta original no lleva cacao ni coco. Si quieres eliminar el cacao debes aumentar la cantidad de harina hasta los 300 gr.
