Después de haber hecho 17 Km. remando en el descenso del sella bien nos entraba un buen cachopo asturiano, como así sucedió. Un restaurante al que fuimos por diversas opiniones positivas y que al menos en lo que a mi respecta no defraudo.
Éramos 5 personas y cada uno pedimos directamente un segundo, varias de las chicas comieron unas sartenes muy apañadas para cenar y quedar bien, una con patatas, cebolla, huevo, angulas sucedáneas y gambas y la otra de pollo, patatas, cebolla y huevo, sin ser un gran plato cumplían las expectativas y por un precio de 9,50€ creo que estaba perfecto.
Sarten de angulas sucedáneas
Sarten de pollo
Mi chica pidió escalopines de cerdo al cabrales, cinco trozos rebozados que por el precio estaban bien, acompañados de una salsa muy suave de cabrales.
Escalopines de cerdo al cabrales
Para mi amigo y para mi, después del gran esfuerzo del descenso bien nos merecíamos un cachopo para cada uno, el lo pidió de cecina y queso de cabra, para mi el de bacón y queso acompañado de patatas fritas, estaba muy sabroso y no costaba comerlo, el rebozado no era muy fino pero no te hartabas de el, no es el mejor, ni más grande que he comido, pero puede estar entre uno de ellos, fue lo suficiente para recuperar fuerzas de todo el día.
Cachopo
En resumen un restaurante que cumplió perfectamente nuestro cometido, comer bien y no excesivamente caro.
Agosto 2016