En los revueltos es muy común utilizar las gambas, pero cuando os canséis, emplead sepia, es un sabor muy agradable y como está muy tierna se come con mucha facilidad.
Ingredientes para unas 6 personas:
Dos sepias (yo las compro congeladas y luego las descongelo, estas pesaban un total de 450 gr.), dos bandejas de setas de cardo, 5 huevos, un chorrito de nata (crema de leche), sal, pimienta y sucedáneo de caviar para adornar.
Elaboración:
Se abren las sepias y se les quita la concha interna, es esa tira rígida y transparente que llevan en el interior los cefalópodos. A continuación se cortan las sepias en tiras de poco menos de un dedo de grosor.
Y se echan a una sartén con poco aceite, se tapa y se ponen a fuego lento.
Por otra parte se lavan y se parten las setas a trocitos, se puede hacer con la mano directamente sin utilizar el cuchillo.
Cuando la sepia ya esté de color blanco, se prueba y si ya está blanda se añaden las setas, la sal y la pimienta.
Se deja unos quince minutos con la tapadera puesta y siempre a fuego lento removiendo de vez en cuando.
Por último se agregan los huevos con el chorrito de nata (crema de leche) para que les de más esponjosidad y se remueven con una espátula constantemente con el fin de que los huevos no se hagan tortilla, sino que se queden sueltos.
Finalmente, a la hora de servir el revuelto se adorna con un poco de sucedáneo de caviar, en este caso en el frigorífico tenía del rojo. Otras veces le he puesto del negro, en ambos casos se queda bonito, hacedlo como más os guste.
Recomendaciones: Este plato está más sabroso caliente, si lo preparáis con antelación es mejor dejarlo en la sartén y cuando se vaya a comer lo calentáis un poco y lo adornáis.
¡¡ESPERO QUE OS GUSTE!!