No lo he tenido demasiado complicado esta vez, lo reconozco. Tenía muy claro, demasiado, que tenía que ser receta salada, una vez decidido esto, el siguiente paso vino solo en cuanto entré a ver los arroces.
Me encanta la berenjena. Me encanta preparar risottos. Así que si juntamos ambas cosas puedo decir que el pasado fin de semana disfruté preparando la comida. El resultado ha sido un arroz súper cremoso con ese toque dulce que acompaña con éxito algunos platos salados.
Muy rápido de preparar es ideal para una comida ligera. Si lo acompañas de una ensalada no hace falta que hagas más.
Ingredientes2 berenjenas1 cebolleta1 vaso de arroz arborio1/2 vaso de vino blanco1 litro de caldo de pollo suaveRomeroQueso de oveja Manchego Miel
Lavamos las berenjenas y las partimos por la mitad. A una de ellas le quitamos un trocito de la parte estrecha antes de abrirla y lo reservamos. Les hacemos unos cortes transversales sobre la pulpa y las metemos 6 minutos en el microondas.
Mientras tanto, picamos la cebolleta finamente y la pochamos en un poco de aceite.
Sacamos las berenjenas del microondas y quitamos la pulpa. La troceamos y la echamos en la sartén con la cebolleta pochada. Doramos y salpimentamos la gusto. Espolvoreamos con romero al gusto. Añadimos una cucharadita de miel y mezclamos bien.
Incorporamos el arroz y rehogamos unos minutos todo junto.
Añadimos le vino. Removemos para qu ele arroz lo vaya absorbiendo poco a poco. Una vez consumido vamos añadiendo cazos de caldo de pollo poco a poco. No añadiremos más caldo hasta que el anterior no se haya absorbido. Hay que remover constantemente para que vaya soltando el almidón y resulte un arroz muy cremoso.
Una vez hayamos terminado el caldo, añadimos el queso Manchego rallado. Mezclando bien para que se integre en el arroz completamente. Dejamos reposar.
Mientras reposa el arroz, cortamos el trozo de berenjena que teníamos reservado y pasamos las rodajas por harina. Calentamos aceite en un cazo y freímos los chips hasta que estén dorados. Ojo que se queman rápido. Los dejamos sobre papel absorbente para quitarles el exceso de aceite. Reservamos.
Emplatamos el arroz. Ponemos una ración de arroz en un plato y unos chips de berenjena. Regamos con un poquito de miel y servimos inmediatamente.
Fuente: este post proviene de Cuadernos de cocina, donde puedes consultar el contenido original.
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