Los bombones o rocas de chocolate son un bocadito ideal para tomarlos solos o acompañar otros postres como decoración. Se preparan en pocos minutos y conservan muy bien, así que son perfectos para preparar con antelación o para regalar.
Tan sólo vamos a necesitar dos ingredientes: chocolate y frutos secos.
Podemos utilizar chocolate negro, con leche o blanco. El que más nos guste, pero eso si, que sea de buena calidad, que se va a notar en el resultado final.
Y como complemento, los frutos secos que más nos apetezcan: pistachos, avellanas o almendras tostadas, nueces o incluso pipas o kikos. También los podemos preparar con galletas trituradas o con cereales: arroz inflado, copos de maíz o con frutas desecadas como pasas, naranjas, arándanos... ¡las combinaciones son múltiples!.
Hoy hemos preparado rocas de chocolate blanco con pistachos salados y nueces, ¡espectacular!, y unas más clásicas de chocolate negro y avellanas.
Ingredientes:
para las rocas de chocolate blanco:
- 300 gr. de chocolate blanco de postres
- 1 cucharadita de manteca de cerdo
- 100 gr. de pistachos salados
- 50 gr. de nueces peladas
para las rocas de chocolate negro:
- 400 gr. de chocolate negro 70%
- 1 cucharadita de manteca de cerdo
- 200 gr. de avellanas tostadas
Preparamos las rocas de chocolate blanco:
1.- Troceamos los frutos secos y reservamos.
Lo hemos hecho con un cuchillo para no pulverizar los frutos secos y que al formar las rocas se noten los trocitos.
2.- Fundimos el chocolate al baño maría con cuidado de no quemarlo.
Si utilizamos thermomix, troceamos el chocolate (en primer lugar el blanco), lo introducimos en el vaso, lo rallamos unos segundos a velocidad máxima, añadimos la manteca y programamos unos 5 minutos a 37º, velocidad 1. Si terminado el tiempo no está fundido del todo, programamos algún minuto más.
Una vez fundido, incorporamos los frutos secos y mezclamos bien con la espátula.
3.- Con ayuda de dos cucharitas, hacer montoncitos sobre una bandeja forrada de papel de hornear y dejar enfriar
Repetiremos el mismo proceso con el chocolate negro.
Si utilizamos thermomix para fundir el chocolate, es interesante empezar con el chocolate blanco porque de esta forma no hace falta limpiar el vaso para repetir el proceso con el chocolate negro.