Una receta fácil, sencilla, rápida y que les encanta a niños y mayores, se suelen usar mucho más los congelados, pero si tengo tiempo me gusta prepararlos en casa, y darles mi toque personal.
Puedes darle ese toque con el tipo de jamón york que uses, también con pechuga de pollo o pavo, poniéndole entre el jamón y el queso alguna loncha de chorizo, salchichón etc..., cambiando el tipo de queso, gruyere, emmental, cheddar, azul etc...., y por supuesto el pan rallado añadiéndole las especies que quieras, orégano, perejil, tomillo, albahaca, pimienta, queso rallado, ajo.......en fin puedes comer San Jacobo todos los días durante más de un mes y no comerlo nunca de la misma manera jajajaja.
En esta ocasión os dejo el normal, el de toda la vida.
SAN JACOBO
-6 lonchas de queso fundido
-2 huevos
-pan rallado con orégano
-aceite para freír
Ponemos las lonchas de queso entre dos lonchas de jamón york.
Pasamos el jamón york relleno de queso, primero por huevo batido y luego por el pan rallado
Ponemos a calentar el aceite y cuando esté bien caliente freímos los San Jacobos hasta que estén bien doraditos por los dos lados. Dejamos que escurran el aceite sobrante sobre una servilleta de papel.
Y listo para comer. Buen provecho.
Así lo hago yo. Dime como lo haces tú.
Fuente: este post proviene de Como cocino yo, donde puedes consultar el contenido original.
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