Entramos en la semana previa a la Semana Santa, por lo que ya tenemos que ir olvidando los platos de carne en nuestra dieta,y dando paso a otros platos más acordes con la Cuaresma, pero antes os quería dejar esta idea. Ya he comentado en varias ocasiones que el solomillo de cerdo tengo que tomarlo disfrazado, ya que no es una de mis carnes favoritas. Este tipo de preparaciones es de las que triunfan siempre en la mesa. La elaboración no es nada complicada ni laboriosa, además es un plato que podemos preparar con antelación y una vez que lo llevemos a la mesa, calentarlo un poco o presentarlo sin calentar. En esta ocasión he querido acompañarlo de unas patatas chips, también fáciles de preparar, cortadas con la mandolina, para darle el efecto ondulado de las comerciales. Y para terminar el conjunto el vino, otro de los grandes vinos granadinos, el Muñana 3 Cepas, del que os hablo más abajo.
INGREDIENTES (Para 6 personas):
2 solomillos de cerdo de unos 300 gr. cada uno
Aceite de Oliva Virgen Extra
150 gr. de queso de cabra
8 hojas de albahaca
10 tomates secos en aceite
300 gr. de bacon ahumado
1 diente de ajo
100 ml. de caldo de carne
3 cucharadas de nata (crema de leche) para cocinar
Sal
Pimienta
Patatas nuevas (dependerá del tamaño, pero una patata por persona aproximadamente)
Aceite de oliva suave para freír las patatas
PREPARACIÓN:
Picamos finamente los tomates secos, bien escurridos del aceite de conservación (si los tenéis deshidratados, tendréis que tenerlos en agua durante unas horas para hidratarlos). Mezclamos con el queso de cabra en dados, y con las hojas de albahaca bien picadas. Salpimentamos la mezcla y dejamos reservado. Practicamos un corte a lo lardo de los solomillos sin llegar al fondo. Salpimentamos y rellenamos con la preparación anterior. Cerramos los solomillos, envolvemos en las lonchas de bacon y sujetamos con un hilo de cocina o con palillos de dientes. Precalentamos el horno a 200º.
Calentamos dos cucharadas de AOVE en una sartén y doramos un ajo hasta que tome color. Retiramos el diente de ajo y marcamos en la misma sartén los solomillos por todos los lados. Trasladamos éstos a una fuente refractaria y terminamos la cocción en el horno durante unos 15 o 20 minutos a 190º (o un poco más, si son más grandes los solomillos, aunque no debemos pasarlos en exceso). Desglasamos los jugos de la cocción con el caldo de carne y agregamos la nata (crema de leche) líquida. Salpimentamos y dejamos reducir unos 10 minutos hasta que espese la salsa. Lo ideal es dejar reposar los solomillos para poder cortarlos después con facilidad, por lo que los haremos con antelación. Para hacer las patatas chips, lavaremos y cortaremos unas cuantas patatas, y cortamos en lonchas finas onduladas con la ayuda de la mandolina. Calentamos abundante aceite de oliva suave y vamos friendo las patatas por tandas, no tardaran mucho, puesto que son finas, pero tendremos que esperar a que empiecen a dorarse por los filos, ya que si no están suficientemente crujientes después se ablandarán con facilidad. Sacamos y dejamos escurrir el exceso de aceite sobre papel absorbente. Continuamos hasta freírlas todas. Servimos el solomillo en rodajas, acompañamos con un poco de salsa y junto con las patatas chips.
El vino que os traigo hoy es, como ya he dicho, uno de los más conocidos de los vinos granadinos. De las Bodegas Señorío Nazarí, el Muñana 3 cepas del 2007 (aunque ya tenemos a la venta el de 2008, a un precio aproximado de 15 euros la botella). Un vino cuya nota de cata es la siguiente: "Color cereza con brillos granates vivos. En nariz, aromas a fruta madura, confitura de frutos negros, cacao amargo y toques balsámicos. Marcada acidez, buen ensamble de fruta y roble mineral. Crianza 12 meses en barricas de Roble Francés, y 12 meses en botella en cuevas naturales". Según la bodega se trataba de conseguir un vino potente y complejo pero a la vez amable al paladar, que nos muestra la suavidad, color, aromas y fuerza agradable de la variedad Syrah junto con la estructura y poder de ensamblaje de la Cabernet Sauvignon, añadiéndole la suavidad de la Merlot. En definitiva, un gran vino que podemos tomar con platos de carne como el que os presento hoy.
Con estas propuestas os dejo, esperando que paséis un buen lunes.
Lidia.