Hola!! les dejaré esta deliciosa y práctica receta por aquí, además es muy nutritiva y créanme, a los niños les encantará, es una buena manera de comer verduras sin sufrirlas...
Yo le llamo pasta falsa, pues en realidad es pura calabacita italiana cortada de manera similar a la pasta, hoy en día encontramos en el mercado diversos productos que nos ayudan a dar una apariencia muy profesional a muchas preparaciones, y además nos facilitan la vida... y nos ayudan a cambiar a un estilo más saludable en nuestra forma de alimentarnos, por esa razón en esta ocasión les presento este plato que en verdad es un éxito siempre que lo preparo y he de decirles que no son muy afectos a las calabacitas.... pero éstas se las devoran!!
Ingredientes:
3 Calabacitas italianas grandes bien lavadas
1 diente de ajo pequeño
Un poco de aceite de oliva
Sal y pimienta al gusto
Queso parmesano o algún queso de su preferencia
Pimentón rojo para adornar (opcional)
Procedimiento:
Comenzaremos cortando las calabacitas, yo utilicé una máquina que hace poco me regaló mi esposo, fácilmente la pueden encontrar en tiendas departamentales en la sección de artículos de cocina, o bien, hay unos peladores que son más sencillos de conseguir, con los que prácticamente le sacas punta a las verduras de tu elección, pues se trata de un tipo saca puntas de lápices, que tiene una cuchilla que corta de distintas formas o grosores, lo malo de utilizar ese aditamento es que se desperdicia mucha verdura, aunque luego la puedes utilizar picada en algunas otras preparaciones.... en fin, con esta maquinita puedes aprovechar muy bien la verdura de tu elección, siguiendo las instrucciones del producto.
Cuando tengas lista la calabacita, bien cortada toda, pues procedemos a cocinarla, será por unos breves instantes, pues de lo contrario no queda muy rica, la idea es que quede casi cruda, para que le dé una textura "al dente" como si fuese pasta, si la cocinamos mucho, quedará muy suave.
Debemos calentar un poco el aceite de oliva y añadir el ajo, lo acitronamos un poco, sin que se queme o dore en exceso, pues no quedará rico, ya saben que sólo será un instante.
Enseguida debemos colocar la "pasta" y sazonar con sal y pimienta al gusto y mover con cuidado, para que toda se impregne de un poco de aceite de oliva aromatizado con el ajo.
Cuando hemos sazonado y hemos cocinado la pasta unos instantes le añadimos el queso rayado, yo utilizo parmesano, pero cuando no tengo, no hay problema, pueden utilizar cualquier otro queso que puedan rayar y se funda, como Chihuahua, Manchego, Gouda, en fin... y mezclamos, un poco hasta que el queso se integre y listo!!
Es momento de servir y en este caso, añadí un poco de pimentón rojo o paprika, sólo para darle color.
En esta ocasión esta pasta me sirvió para acompañar un rico pollo en salsa de champiñones al vino blanco, créanme, es una delicia.... Se animan?? no se arrepentirán...