Cualquier receta de pasta con salsa de nata (crema de leche) y queso recibe el nombre de Pasta Alfredo. Estos tallarines, pues, serían una pasta Alfredo con espinacas y langostinos.
Me gusta muchísimo la combinación de espinacas, langostinos y queso, que además es muy nutritiva y les encanta a mis chicos en casa.
La idea me la dio mi hijo Nacho, el cocinillas, que vio una pasta similar en la aplicación de Tasty. En esa receta se hervían los tallarines en la leche mezclada con la nata (crema de leche) y así se ahorraba tiempo.
No me convencía mucho la idea. Prefiero hervir la pasta en agua salada y hacer la salsa aparte, aunque quizás debería probara a hacerlo así algún día y contároslo.
Para 4 personas:
400 g de pasta
300 g de espinacas frescas
500 g de langostinos
1 diente de ajo
aceite de oliva virgen (o mantequilla)
200 mL de nata (crema de leche) para cocinar (1 brik)
1/2 vaso de leche
1 cucharada de queso crema tipo Philadelphia
queso parmesano en polvo
sal
pimienta molida
Se hierve la pasta en abundante agua salada los minutos que indique el fabricante.
Se pone en una cazuela un poco de aceite de oliva (o de mantequilla) y se añade el ajo muy picado y los langostinos pelados (mejor crudos, yo tenía langostinos cocidos para una ensaladilla cuando decidí hacer la receta). Se rehoga unos instantes.
Se añaden las hojas de las espinacas lavadas y cortadas, se tapa la cazuela y se deja que se hagan unos minutos.
Se incorpora la nata (crema de leche), el queso crema y la leche y se salpimenta.
Se cocina unos instantes hasta que quede la salsa lisa con los trozos de espinaca y langostino.
Se escurre la pasta cocida y se le añade la salsa. Se espolvorea con queso rallado y se sirve de inmediato.