Después de muchos viajes a Marruecos por trabajo, esta semana santa, por fin he ido con la familia de vacaciones, al desierto. De todos los momentos maravillosos que hemos vivido estos días, me quedo con las caras de mis hijos y mis sobrinos viendo aquellos paisajes, dunas, colores, sintiendo los olores, las gentes. Ha sido una experiencia única y como no, hemos comido y disfrutado con ello. Aquí os dejo esta receta de Tajine de pollo, que espero que disfrutéis y hagáis.
Para cuatro comensales:
4 muslos con contramuslos separados unos de otros y despojados de la piel
12 aceitunas negra de Aragón
12 ciruelas pasas
Un puñado de uvas pasas
12 cacahuetes que doraremos en aceite de oliva y majaremos en un mortero.
½ rama de canela
2 clavos de olor
3 cebollas grandes en juliana
2 cucharadas de vinagre de manzana para darle un poco de alegría
Zumo de ½ limón
4 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
½ cucharadita de comino molido
¼ de cucharadita de jengibre en polvo
¼ cucharadita de cilantro molido
Pimienta molida y sal
Acompañaremos con unas verduras al vapor en la base del plato, en nuestro caso, calabacín, berenjena y zanahorias.
1 hoja de laurel
Muy sencillo, empezamos rehogando y dorando suavemente los trozos de pollo en el aceite de oliva virgen extra, a fuego suave. Previamente los habremos salpimentado. Los apartaremos.
Ahora en ese aceite, doraremos las cebollas, con un poco de sal. Cuando empiecen a cambiar de color, añadimos el pollo y lo hacemos todo junto. Pasados 3 ó 4 minutos añadimos las especias, el vinagre de manzana, el chorrito de limón, el majado de los cacahuetes y cubrimos de agua. Salpimentaremos y dejaremos reducir 30 minutos.
Pasado este tiempo, añadiremos la canela, las uvas y las ciruelas pasas junto con las aceitunas negras, dejando reducir hasta que el pollo esté blando, unos 20 minutos más.
En la base del plato colocamos las verduras al vapor, encima el pollo y rociamos con la salsa, las aceitunas, las uvas y las ciruelas. Una verdadera delicia.