Una buena opción para la cena de fin de año, en la que el ambiente y el menú puede ser más relajado, son deliciosos los tamales huastecos, envueltos en hoja de plátano, lo cual les dará un rico sabor, se pueden rellenar con carne de puerco, pollo, rajas, queso, en fin, ustedes deciden, en esta ocasión los rellené de carne de puerco en chile rojo, quedan muy ricos.
Esta receta es tradicional de la Huasteca Potosina, con alguna que otra variante, pues cada familia tiene su toque.
Ingredientes para la Masa:
2 Kilos de Masa de Maíz
1/2 kilo de Manteca Vegetal (puedes combinar mitad y mitad de cerdo y vegetal)
2 cucharadas de sal
Agua la necesaria (puedes utilizar caldo de pollo)
Procedimiento:
Primero debemos batir muy bien la manteca hasta que se acreme y se esponje, yo lo he hecho en batidora, pero bien puede ser a mano, sólo que hay que batir y batir con la ayuda de una pala de madera, hasta lograr que quede esponjosa, la manteca que se usa de manera tradicional es la de cerdo, pero hay a quienes no les agrada mucho, ya que tiene un sabor un poco más fuerte, así es que puedes utilizar sólo manteca vegetal o combinar mitad y mitad.
Cuando ya tienes la manteca bien esponjada agregamos la sal y vamos agregando también la masa poco a poco, sin dejar de batir, ve incorporando un poco de caldo o agua para ayudar a la batidora a que se mezcle bien, sólo que de poco, para que no quede muy líquida la mezcla.
Al estar toda la masa incorporada a la manteca, mezclamos bien, y sabremos si está lista al tomar una bolita pequeña de masa y dejarla caer en un vaso con un poco de agua, si la bolita de masa flota, quiere decir que ya está lista la masa para untar, pero si se va al fondo, quiere decir que le falta batido, y debemos seguir trabajando con ella. Tal y como se muestra en la imagen inferior derecha, debe de flotar.
Para preparar las hojas de plátano, debemos lavarlas y escurrirlas muy bien y colocarlas directo sobre la flama de la estufa, un poco, notarán que cambia de color y se vuelve más brillante, eso es lo que queremos, así no se romperán y podremos armar los paquetitos (tamales), tal y como se aprecia en la imagen superior izquierda.
Debemos cortar las orillas, ya que éstas al ser un poco rígidas, no nos ayudan a doblar con facilidad la hoja. Cortamos cuadrados del tamaño deseado, generalmente yo lo corto de 25 a 30 centímetros por el ancho de la hoja.
Como verán la segunda fotografía superior, muestra la textura de la masa y en la tercera de la primera hilera, nos enseña la forma de untar la masa sobre la hoja, en realidad no se trata de colocar mucha masa ya que tenderá a esponjar un poco. Después vemos la manera de colocar el relleno, en este caso es puerco en chile rojo, y procedemos a doblar los paquetitos, debemos colocarlos en una vaporera y taparlos con una bolsa de plástico, posteriormente los tapamos con la tapadera de la vaporera. Abajo deberá llevar suficiente agua para que se cocinen al vapor a fuego bajo, se acostumbra colocar una moneda en el fondo para que el sonido que emite al hervir con agua nos avise cuando todavía tiene líquido, si dejara de sonar, entonces nos avisa que necesita mas agua, de lo contrario se quemarán los tamales, y la olla...
Debemos dejarlos cocinar a fuego bajo, tapados durante 2 horas aproximadamente, hay que vigilarlos, ya que no queremos que se queden sin agua y estarán listos cuando al revisar alguno, éste se desprenda fácilmente de la hoja y notemos que ya se haya cocinado completamente.
El día que preparé estos tamales, se me terminaron las hojas de plátano, así es que otra buena opción para cocinarlos es envolverlos en hojas de acelga lavadadas, y la ventaja de éstas es que son comestibles, y quedan deliciososo!! otra opción es envolverlos en papel aluminio, no tendrán el mismo sabor delicioso de la hoja de plátano, pero quedarán muy ricos, también puedes hacerlo en hojas de maíz, en caso de que se te terminen las hojas de plátano y todavía tengas masa. A mi se me antojó hacer unos cuantos dulces, y los envolví en aluminio, sólo les agregué acitrón picado o biznaga, nueces, piña en almíbar picada (solo la fruta), pasas de uva y hasta coco rallado, quedan muy ricos, a unos les coloqué un poco de dulce de leche o cajeta y he de decirles que quedaron exquisitos.
Para el Relleno Salado:
Pulpa de Cerdo o pechuga de Pollo en trocitos
4 Chiles Guajillo o Mirasol
2 Tomates Asados
Cebolla al gusto Asada
1 Ajo asado
2 Cucharadas de Ajonjoli tostado (opcional)
Sal y pimienta al gusto
Procedimiento:
Comenzamos limpiando los chiles, hay que desvenarlos y ponerlos a tostar en un comal o una sartén, que no se quemen, pues amargará el sabor, sólo es que se doren y tuesten un poco, después los ponemos a hervir en agua, para que se suavicen.
Mientras tanto, asamos en un comal los tomates, la cebolla y el ajo, cuando está todo listo, los colocamos en la licuadora, retirándoles previamente la piel a los tomates, agregamos los chiles con un poco del líquido de la cocción y el ajonjolí que deberá estar ligeramente tostado en una sartén. Puedes o no agregar el ajonjolí, pero te cuento que le da un rico sabor a este adobo. Sazonamos con sal y pimienta y licuamos perfectamente.
El adobo o mole resultante lo mezclamos con la carne que vayamos a utilizar, ya sea pollo o cerdo, lo que hayamos elegido, generalmente se utiliza costilla de cerdo, pero a mi no me gusta encontrar huesitos en mi tamal, así es que mejor le agrego pulpa de cerdo o pechuga de pollo deshuesada y picada.
Listo, al armar los tamales debemos colocar una porción con carne de este molillo en cada tamal y verán qué rico queda.
Les comentaba que podían también utilizar rellenarlos de pollo en salsa verde, o de rajas de chile poblano con queso, en fin, es su elección, lo que sí les puedo decir es que quedan deliciosos y son muy tradicionales en algunas familias para la cena de fin de año, sólo acompañados con unos ricos frijoles refritos, queso y crema, se animan?