Ingredientes:
- 200 gramos de chocolate negro (para las láminas y la cobertura).
- 500 mililitros de nata (crema de leche).
- 3 claras de huevos.
- 120 gramos de azúcar.
Elaboración:
Lo primero que hacemos son las láminas de chocolate. Derretimos 150 gramos de chocolate en el microondas y en un papel de horno vamos realizando nuestras láminas de chocolate del mismo grosor y tamaño que nuestro molde. Las metemos al frigorífico para que se enfríen. Podéis hacer de cuatro a cinco láminas de chocolate.
A continuación, montamos por un lado la nata (crema de leche), recordar que tiene que estar bien fría tanto la nata (crema de leche) como los utensilios a utilizar y añadimos 60 gramos de azúcar. Lo mismo hacemos con las claras de huevo y añadimos los otros 60 gramos de azúcar. Luego unimos todo con movimientos envolventes para que no se nos baje.
Ahora forramos nuestro molde con papel de horno, mejor si es alargado, para que se parezca más a la original y echamos una capa de nata (crema de leche) y una lámina de chocolate, una capa de nata (crema de leche) y una lámina de chocolate, así hasta terminar la tarta que lo tenéis que hacer con nata (crema de leche). Luego la tapáis con el mismo papel de horno o papel albal y la metéis al congelador hasta el día siguiente. Antes de servirla derretís el chocolate que os quedaba y le ponéis con una cuchara o un biberón hilos de chocolate por encima, en este caso he añadido un ocho por los años que llevamos de desafío y ya está lista para servir.