Enamorada me hallo. Cada vez me cuesta más tener un postre favorito, y más con recetas como esta tarta de avellanas sin azúcar. Si queréis ver por qué, mirad qué pinta tiene y seguid leyendo…
Este mes en el Asaltablogs nos ha tocado entrar en la cocina de Eva, de Pekando con Eva. Me ha venido de perlas porque hace un tiempo que tenía una receta suya en la mente, esta tarta de avellanas. He tenido una oportunidad de oro para robársela, vaya.
La he llevado para comer con la familia, y mi primo lo primero que ha dicho al probarla ha sido «Es la mejor tarta que has hecho nunca, sabe a Kinder Bueno«. Me he partido. Alex discrepa, no cree que sea la mejor que he hecho (pero le ha gustado mucho también, lo hace por llevar la contraria), y yo ni me lo planteo porque estaba riquísima.
Por eso os decía al principio que me cuesta escoger un postre favorito, a mí es que me gustan todos! Y favoritos tengo muchos. Todo lo que no lleve coco (ya sabéis por qué tengo tan poquitas cosas sin coco), me gusta
Sí que es verdad que sabía al relleno que lleva el Kinder Bueno, sí, es muy ligerita y suave, si la probáis os vais a enamorar como yo. La textura es como una mousse, y la podéis airear más o menos según os guste.
Se puede hacer con otros frutos secos, como almendras o nueces. Lo importante es que en el momento de triturarlos consigáis la crema como la que os enseño en el paso a paso, lo más fina posible, para que no se noten los tropezones.
Y si a los peques en casa les cuesta comer frutos secos, recetas como esta tarta de avellanas sin azúcar nos vienen muy bien para que los coman sin darse ni cuenta.
El molde que yo he usado es de 18cm de diámetro
Quería decorarla con algo de chocolate, haciendo alguna formita, pero no tenía tiempo y he cortado por lo sano espolvoreando cacao puro por encima. Y oye, le da un toque muy rico cuando te la comes. La de Eva está más monina, con unas formitas que ha hecho con una plantilla, por si queréis más ideas
Al final, la sencillez en las tartas también me gusta mucho, es cuando mejor se ve lo rica que está, la textura que tiene… cuando no le pones florituras. Decidme que no os dan ganas de pegarle un mordisco a la foto
Espero que os guste, ¡en casa hemos estado encantados!
Información Nutricional
Cada ración de 50gr de esta tarta de avellanas sin azúcar contiene:
154,07 kcal
5,83gr HC
La he adaptado un poco a partir de la versión original para reducir las grasas, le he quitado los huevos, el azúcar, la harina y parte de la nata (crema de leche). Así que al final me ha quedado una tarta light y baja en calorías riquísima, sencilla y muy ligera que entraba genial.
Ingredientes:
PARA LA BASE:, 80gr de avellanas tostadas peladas, 80gr de galletas integrales sin azúcar, 2 cucharadas de leche, PARA LA MOUSSE:, 150gr de avellanas tostadas peladas, 300ml de leche desnatada o vegetal, 200ml de nata (crema de leche) para montar, 5 láminas de gelatina neutra (o 13gr de gelatina neutra en polvo), 15gr de stevia granulada, Una cucharadita de esencia de vainilla, Una pizca de canela, Cacao en polvo sin azúcar para decorar
Instrucciones:
Primero prepararemos la base. Picamos las avellanas (80gr) con la picadora hasta que quede una crema espesa. Añadimos las galletas y volvemos a picar hasta que se integre bien.
Pasamos la mezcla a un bol, añadimos un par de cucharadas de leche, y lo integramos con una espátula. Ponemos esta mezcla sobre la base de un molde desmontable y hacemos presión para compactarla bien. Si cubrís los bordes con acetato o papel dee horno luego os costará menos de desmoldar y quedarán más bonitos los bordes.
En un cazo a fuego medio, calentamos la leche y disolvemos la gelatina previamente hidratada, removiendo bien. Dejamos atemperar y reservamos.
Picamos el resto de las avellanas (150gr) en la picadora, hasta conseguir una crema lo más fina posible, sin grumitos.
Ponemos esta crema de avellanas en un bol grande, donde vamos a preparar la mousse. Añadimos la leche con gelatina, la vainilla, la canela y la stevia, y batimos con la batidora eléctrica, aireando para conseguir burbujitas.
Montamos la nata (crema de leche) aparte, bien fría, y la incorporamos al bol anterior con movimientos envolventes para no perder aire y ganar cuerpo con la nata (crema de leche).
Vertemos la mezcla de la mousse de avellanas con cuidado sobre la base en el molde, y dejamos enfriar en la nevera durante por lo menos 3-4 horas.
Decoramos con cacao, con la ayuda de un colador o tamiz, servimos, ¡y listo!
Puedes ver esta entrada en Dulces diabéticos.