El sábado me tocó soplar las velas de nuevo, un año más y ya son muchos, cada vez más, que por otro lado es lo normal, pero no se, este año me encuentro rara, seguro que será la crisis de los cuarenta. La cuestión es que se me acaban las ideas para la tarta de cumpleaños, en mi casa cada año la esperan impaciente y yo cada año tengo menos ganas de hacerla, pero bueno, hice el esfuerzo y preparé esta tarta de crepes, que por otro lado me apetecía preparar, pero no es tan bonita como otras que he preparado otros años. Como casi siempre le pongo un topping de frutos rojos, aunque este año no le he puesto frambuesas que son mi favoritas porque no las encontré en el super.
El relleno de la tarta es la misma crema de la tarta red velvet y los cupcakes del mismo nombre, es decir, una crema de queso crema, a la que le añadí cacao en polvo.
La masa de los crepes no lleva azúcar, el relleno ya, para mi, es lo suficientemente dulce, pero si vosotros queréis añadirle algo de azúcar podéis ponerle unas cuantas cucharadas de azúcar.
Con la masa me salieron 23 crepes, que son todos los que lleva la tarta. Después de tenerla casi montada la tuve que deshacer y volver a montar de nuevo. El motivo es que iba untando la crema a los crepes encima del anterior, y se iban moviendo los crepes de abajo, por lo que mi consejo es ir untanto cada crepes individualmente y luego ponerlo sobre el anterior, así no perderá en ningún momento estabilidad la tarta, no se si me explico.
INGREDIENTES:
Para la masa de crepes:
4 huevos
250 gr. de harina
500 ml. de leche
50 gr. de mantequilla
Una pizca de sal
Azúcar (unas cucharadas, opcional)
Para el relleno:
400 gr. de queso crema
150 gr. de mantequilla
375 gr. de azúcar glass
2 cucharadas de cacao en polvo Valor
Para el topping:
Moras
Grosellas
Arándanos
Cacao en polvo Valor
PREPARACIÓN:
La noche antes preparamos la masa de crepes, y lo hacemos poniendo en el vaso de la batidora y batimos para integrar bien todos los ingredientes. Tapamos y dejamos en el frigorífico toda la noche.
Por la mañana engrasamos una sartén no muy grande y la calentamos, vamos haciendo los crepes, uno a uno, echando dos cucharadas de masa para cada uno y girando la sartén para que ocupe la masa toda la base, cuando haya pasado un minuto le damos la vuelta con una espátula y doramos por el otro lado, ponemos sobre papel vegetal, una encima de otra, hasta terminar toda la masa.
Cuando estén todos preparamos el relleno, batimos la mantequilla, que estará a temperatura ambiente, junto con el azúcar glass y el cacao en polvo hasta que se integren totalmente, añadimos el queso crema muy frío y seguimos batiendo hasta que esté totalmente integrado en la crema, pero sin batir en exceso para que no se caliente la crema. Una vez terminada vamos untando una capita fina de crema sobre cada crepes y montando la tarta sobre el plato o stand de presentación. Una vez lista, sobre la última capa untamos también un poco de crema. Metemos en el frigorífico un par de horas y decoramos con los frutos rojos y con cacao en polvo espolvoreado por encima.
Es una tarta que tiene muy buen corte, y además bonito, porque quedan todas las capas a la vista. Y si sois amantes de los crepes, como mi hija Laura, vais a disfrutar de la tarta como enanos, seguro. Ya me contaréis.
Feliz miércoles.
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