Os traigo una tarta que para mi ha sido una muy grata sorpresa. Nunca pensé que una tarta con cerveza podría estar tan buena. La había visto en muchos sitios pero no me llamaba... hasta que mi hija (María caprichos, como yo la llamo) se plantó y casi me obligó a hacerla.
La cerveza le da al bizcocho de chocolate un sabor muy especial que mezclada con la crema de Mascarpone es ... como explicarlo...Mejor la probáis y me contáis. ¡¡Feliz fin de semana a todos!!
Ingredientes:
Bizcocho:
- 200g de harina
- 70 g de cacao en polvo puro
- 300g de azúcar
- 1 sobre de levadura química
- 200 ml de cerveza negra (guinness)
- 200g de mantequilla o margarina
- 100 ml de nata (crema de leche) líquida
- 2 huevos
- una cucharadita de esencia de vainilla
Para la cobertura:
- 200 ml de nata (crema de leche) para montar
- 200g de queso Mascarpone
- 100g de azúcar glas
Precalentamos el horno a 180º.
Ponemos la cerveza y la mantequilla en un cazo y la ponemos al fuego hasta que se derrita la mantequilla, sin que llegue a hervir. Reservamos.
Mezclamos la harina, el cacao y la levadura.
En un bol, batimos los huevos con el azúcar, añadimos la esencia de vainilla.
Añadimos la cerveza y mezclamos.
Después añadimos la mezcla de harina y cacao. Mezclamos bien.
Lo ponemos en un molde untado con mantequilla y harina y lo horneamos 45-50 minutos aproximadamente a 180º.
El tiempo ya sabéis que es relativo depende de cada horno, pincharlo con un palillo para ver si está hecho. Dejamos enfriar y desmoldamos.
Hacemos la cobertura montando la nata (crema de leche) hasta que esté consistente.
En un bol batimos el queso con el azúcar glas, añadimos la nata (crema de leche) y mezclamos con cuidado.
Podemos presentarlo simplemente con la cobertura por encima, o como yo, cortarlo por la mitad, rellenamos con un poco de crema de queso y el resto por encima.
Va a estar buena de todos las maneras, solo que al rellenarlo por dentro se queda mucho mas jugosa.