La ricota es uno de esos ingredientes que no faltan en mi heladera ya que este queso es tan versátil que lo podemos usar en preparaciones dulces o saladas y hasta comerlo solo con un poquito de sal o acompañarlo con un trozo de dulce de membrillo.
Este queso de color blanco y suave llego hace mucho tiempo de la mano de los inmigrantes italianos.Se obtiene de un segundo procesamiento del suero lácteo que sale de la elaboración de otros quesos blandos como la Mozzarella ,Provolone y Cheddar .
La torta de ricota es una de mis favoritas y si lleva pasas de uva mucho mas rica.
Ingredientes.
Para la masa:
200 gramos de manteca pomada
120 gramos de azúcar blanca
2 huevos
400 gramos de harina
1 cucharada de polvo de hornear
1 pizca de sal
ralladura de limón
vainilla
Para el relleno:
500 gramos de ricota entera ( no descremada ni light )
100 gramos de azúcar
2 claras
1 cucharada de almidón de maíz
vainilla
pasas de uva sin semilla
Batir la manteca pomada con el azúcar y los huevos,añadir la ralladura de limón y la vainilla.Agregar la harina,el polvo de hornear y la pizca de sal.Obtener una masa suave pero sin amasar demasiado solo lo suficiente para unir bien. Llevar el bollo a la heladera tapado o envuelto con un film por al menos 1 hora.
Mientras tanto preparar el relleno procesando la ricota o realizando un puré con un tenedor para obtener una pasta muy suave y sin muchos grumos,yo uso ricota entera porque es mucho mas consistente para realizar este relleno.Mezclar con la azúcar y la vainilla.
Añadir al relleno 2 claras de huevo (no es necesario batirlas antes).Unir muy bien y agregar el almidón de maíz.Si se desea se pueden agregar pasas de uva sin semilla previamente pasadas por harina.
Luego que la masa descanso en la heladera la dividimos en dos partes iguales y la estiramos con palote de amasar sobre una mesada enharinada para que no se pegue a la misma.
Forrar una tartera enmantecada de unos 26 centímetros de diámetro,volcar el relleno en forma uniforme sobre la masa y luego tapar con la masa restante,pintar con yema batida.Llevar a un horno caliente por alrededor de 30 minutos.
Dejar enfriar muy bien y luego espolvorear la superficie de la torta con azúcar impalpable.
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