Las hierbas frescas y todos los condimentos ofrecen una excelente y variada posibilidad de experimentar sabores y aromas.
Son libres de calorías por lo que puedes usarlas libremente. En numerosos platos pueden reemplazar la sal.
En general los vinagres y el zumo de limón no aportan calorías y resultan el condimento ideal para ensaladas, salsas, pescados y aves.
Es conveniente usar los productos lácteos enteros por sus equivalentes desnatados. De esta forma mantienes todas las propiedades de vitaminas y minerales, sin agregar grasa a tu dieta.
La vainilla es un ingrediente muy usado en la cocina pues pese a sus pocas calorías, aumenta la sensación de dulzura de otros ingredientes. Se puede agregar a los yogures, frutas, café, quesos desnatados, etc.
Si sigue un régimen de dieta o desea evitar subir el colesterol, cocine el pollo sin piel, donde más abunda este valor.
Recomendaciones para una preparación higiénica de los alimentos:
Elegir los alimentos tratados higiénicamente.
Cocinar bien los alimentos.
Consumir inmediatamente los alimentos cocinados.
Guardar cuidadosamente los alimentos cocinados.
Recalentar bien los alimentos crudos y cocinados.
Lavarse las manos a menudo.
Mantener escrupulosamente limpias todas las superficies de la cocina.
Mantener los alimentos fuera del alcance de insectos, roedores y otros animales.
Evitar el contacto entre alimentos crudos y los cocinados.
Utilizar agua potable.
Antes de comprar uvas, agite el racimo suavemente. Los granos deben permanecer en su sitio. Si caen algunos la uva está demasiado madura.