Buenas cerezas, buen chocolate y a triunfar. Da igual las que pongas, se acabarán.
Ingredientes:
cerezas.
chocolate negro.
chocolate blanco.
Hemos escogido cerezas y no picotas por el rabito. Es necesario que tengan rabito para manipularlas y posteriormente poder cogerlas por algún lado para llevárnoslas a la boca.
Lavamos las cerezas una a una confirmando que están maduras pero sanas. Sin golpes ni agujeritos.
Las secamos totalmente ayudándonos de unas hojas de papel de cocina y las reservamos.
Troceamos el chocolate negro que hayamos elegido, cualquiera de cobertura servirá pero, cuanto mejor sea mejor será el resultado. Para calentarlo debemos utilizar un bol de cristal totalmente seco, el agua deterioraría la textura de nuestro chocolate y debemos calentarlo a intervalos cortos y a temperaturas medias pues, si lo hacemos demasiado deprisa, corremos el riesgo de quemar el chocolate con lo que se nos arruinaría la textura también.
Hay dos formas de fundir el chocolate para que nos quede bien y nosotros apostamos claramente por el microondas pues con la técnica del “baño maría” puede saltar una gota de agua dentro del bol con el chocolate y habría que empezar de nuevo. Nos ha pasado!.
Cuando tengamos fundido el chocolate negro vamos introduciendo en él las cerezas, hasta bañar tres cuartas partes de cada una y las vamos depositando sobre un papel encerado.
El proceso con el chocolate blanco es el mismo que hemos utilizado con el negro. Poco a poco, temperaturas medias y todos los utensilios bien secos. Bañamos de igual modo la mitad de las cerezas en el chocolate blanco y las dejamos secar sobre un papel encerado.
No es conveniente intentar agilizar el proceso de enfriamiento y solidificación del chocolate que cubre nuestras cerezas utilizando la nevera, el chocolate solidificaría antes pero perdería el brillo y el buen aspecto. Tranquilos, dependiendo de la temperatura ambiente tardará más o menos en solidificar, pero lo hará.
Cuando estén listas montamos nuestras bandejas y a disfrutar de un magnífico postre que hará las delicias de los amantes de la fruta y también de los más golosos.
Fuente: este post proviene de Cocina sin Carné, donde puedes consultar el contenido original.
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