10 platos típicos de Marruecos que no te puedes perder.
Ningún viaje a Marruecos está completo sin dormir en un impresionante riad , tomar fotos de coloridas puertas , buscar tesoros en los zocos, y por supuesto, disfrutar de la deliciosa cocina marroquí. Los sabores ricos y exóticos de aceitunas, limón y azafrán derretirán tu paladar y harán que acabes dejando tu plato como los chorros del oro.
Descubrirás extrañas combinaciones de sabores como pasteles de pollo salados cubiertos con azúcar dulce en polvo que no tienen mucho sentido en el papel, pero que son super ricos en paladar. Te recomendamos que pruebes todos los sabores que puedas al menos una vez, pero de momento te dejamos 10 platos de la cocina marroquí básicos que obligatoriamente tienes que probar durante tu estancia.
Y si además puedes apuntarte a alguna clase de cocina marroquí para que puedas seguir disfrutando de los sabores de Marruecos una vez de vuelta a casa pues mejor que mejor. . Sin más dilación ponte a la mesa que empezamos!
1. Cuscús marroquí, un clásico de su gastronomía
Vamos a empezar esta lista hablando de uno de los platos más típicos de la gastronomía de Marruecos: El Cuscús marroquí. Al igual que la tradición de los asados dominicales para las familias cristianas en Occidente, las familias de todo Marruecos se reúnen los viernes después de la oración para disfrutar de una abundante comida a base de cuscús. Y es que el cuscús compite con los tagines por ser considerado como uno de los platos icónicos de la cocina marroquí y se entrelaza con el ciclo de vida de las familias marroquíes.
Si bien el cuscús se puede pedir en cualquier restaurante marroquí, las mejores versiones son las que se preparan en los hogares. Además de la tradición del viernes de comer cuscús, esta comida especial se prepara comúnmente después del nacimiento de un niño, para su sbouaa (ceremonia de nombramiento) y para la circuncisión de un niño pequeño. A menudo se da como sadaqa(caridad) a los trabajadores pobres y / o de la construcción si construyen o compran una casa o un vehículo nuevo. El cuscús también es preparado por familias afligidas para ofrecer a los visitantes y compañeros de duelo que desean presentar sus respetos a los recién fallecidos.
En Marruecos, las versiones más populares de cuscús incluyen pollo, carne de res o cordero, y están cubiertas con varios tipos de verduras o tfaya, una mezcla dulce y salada de cebollas caramelizadas, pasas y garbanzos.
El cuscús marroquí no suele ser picante, aunque algunas familias pueden optar por agregar uno o dos chiles pequeños al estofado mientras se cuece a fuego lento. En cambio, el sabor impartido al cuscús vegetal marroquí proviene de especias recién molidas como el jengibre, un toque de cúrcuma y pimienta negra. Para el cuscús tfaya, la canela y la miel son los sabores clave. Dentro de la cocina marroquí hay cocineros que prefieren la sémola de grano fino mientras que otros prefieren granos medianos.
La sémola de trigo integral es usada por esposas marroquíes más preocupadas por la salud, y hay otras prepararán su cuscús semanal con cebada. Independientemente del tipo de cuscús, en los hogares marroquíes siempre se sirve en una fuente poco profunda de arcilla vidriada llamada “gsaa” junto con vasos de “lben” recién batido (suero de leche). Una variación de verano del cuscús marroquí tradicional es saycouk, donde la sémola al vapor se enfría y luego se cubre con suero de mantequilla y se endulza con azúcar. Sin duda un plato que no puedes dejar de comer si algún día visitas marruecos.
2. Hummus, un plato sano y delicioso.
Hummus proviene de la palabra árabe que significa garbanzos, y el nombre completo de la extensión preparada en árabe es ḥummuṣ bi ṭaḥīna que significa garbanzos con tahini.
Aunque existen múltiples teorías y afirmaciones de orígenes diferentes en varias partes de Oriente Medio, la evidencia es insuficiente para determinar la ubicación o el momento exactos de la invención del hummus.
Lo que está claro es que es de los platos típicos de Marruecos que no te puedes perder bajo ningún concepto, super típico y super sano elaborado a partir de garbanzos que se machacan hasta conseguir una pasta a la que se añade limón, aceite de oliva y Tahina dando como resultado un “pate” cremoso que se cóme sobre pan de pitá.
3. Tajín, uno de los platos más típicos de Marruecos
El tagine es una parte importante de la gastronomía marroquí y ha sido parte de la cultura durante cientos de años. La palabra tagine en realidad tiene dos significados.
Primero, se refiere a un tipo de utensilios de cocina del norte de África tradicionalmente hechos de arcilla o cerámica. El fondo es un plato circular ancho y poco profundo que se usa tanto para cocinar como para servir, mientras que la parte superior del tajín tiene una forma como de cúpula o cono redondeado.
En segundo lugar, la palabra tagine también se refiere al suculento plato guisado que se cocina lentamente en los utensilios de cocina tradicionales. Típicamente, un tagine es una deliciosa mezcla de carne, pollo o pescado acompañados de vegetales o frutas y sazonado con las mejores especias marroquíes.
Jamás podrás decir que has estado en Marruecos si no has probado este plato! La mejor manera de comerlo es hacer lo que hacen los lugareños: mojando trozos de khobz o pan tradicional marroquí en el guiso y llevándotelo a la boca.
Eso sí, un consejo: Huye de mercados grandes o sitios muy turísticos y busca el Tagine casero. Hay familias y sitios muy locales donde puedes degustar el mejor tajine de marruecos.
4. La Pastela, delicia agridulce de la cocina marroquí.
Hay que decir que este es uno de los platos típicos de Marruecos que más nos ha sorprendido de cuantos hemos probado. Se trata de un plato de fiesta que consiste en un hojaldre relleno de perdiz, pichón o paloma, acompañándose siempre de especias y frutos secos. Además, suele tener un toque de canela logrando una curiosa y maravillosa combinación entre sabores dulces y salados.
Este plato se come sobre todo para celebrar ocasiones especiales en Marruecos. Si te encanta la combinación dulce/salado, entonces la pastela es un plato que no puedes dejar de probar si vienes a Marruecos.
5. Sopa marroquí o Harira.
La Harira, también conocida como la sopa nacional de Marruecos, es otro manjar y muy popular dentro de la gastronomía marroquí como entrante. Además es la comida que se suele consumir durante el mes de ayuno del Ramadán.
La harira consiste en una sopa de tomate y lentejas cocinada con cordero (también se pueden usar muslos de pollo o salsa de carne de res), garbanzos, muchos tomates, algunas hierbas y, por supuesto, especias.
Su sabor y aroma son realmente deliciosos, y si eres un amante de la sopa, no deberías dejar de probarla. Esta sopa, junto con otras, se come tradicionalmente en el desayuno.
6. Sardinas picantes, una delicia para todos los bolsillos.
Marruecos es un importante exportador de sardinas. En Marruecos, las sardinas son el alimento de todo el mundo, tanto de la gente rica como de la gente con menos recursos. Son un componente importante de la dieta marroquí, especialmente en las ciudades costeras.
En las zonas de interior todavía puede encontrarlas como comida callejera, pero solo ciertos días. Por ejemplo, están disponibles en Jama ‘El Fna en Marrakech o en la antigua Medina de Fez, ambas ciudades del interior.
Por lo general, se sirven rellenas con salsa chermoula, un condimento marroquí elaborado para marinar pescados y mariscos , bien como parte de los entrantes o junto con legumbres cocidas y ensaladas frescas para hacer un almuerzo completo.
¡Si visitas Marruecos no dejes de probarlas!
7. Aceitunas, el aperitivo ideal de Marruecos.
Cada hogar en Marruecos siempre tiene dos ingredientes a mano: aceite de oliva y aceitunas. Estos productos son esenciales para la cocina y la cultura marroquí. En el desayuno, los panes y panqueques tradicionales se sumergen en aceite de oliva para comenzar el día; en el almuerzo, las aceitunas se presentan como aperitivo; en la cena se sirve café y té de menta junto con aceitunas y pan; y En la cena, las aceitunas se pueden encontrar en muchos tagines. Las montañas del Atlas y los valles ricos que rodean Marrakech, como el valle de Saraana, son famosos por sus aceitunas finas y aceite de alta calidad.
Y es que puedes ir a Souk Aploh, a las afueras de la plaza Jema al-Fnaa, donde se encuentran las tiendas especializadas en todo lo relacionado con la aceituna y por unos pocos dirhams comprar una selección de aceitunas y decidir cuál te gusta más.
Podrás elegir degustar entre aceitunas verdes, aceitunas negras maduras especiales de Marrakech, aceitunas rosadas e incluso aceitunas marinadas con harissa.
No obstante siempre están presentes en la mesa marroquí y suele ser habitual que te las sirvan como aperitivos en muchos lugares mientras esperas la comida.
8. Pan Khubz, un acompañante obligatorio en la gastronomía marroquí.
Khobz es un pan tradicional marroquí que se forma en panes redondos y planos y se hornea en un horno hasta que se forme una corteza crujiente. Se puede hacer con diferentes tipos de harina como trigo, salvado, cebada y sémola aunque el termino Khubz suele hacer referencia al pan blanco, que casi siempre se encuentra en rondas que son aproximadamente del tamaño de un frisbee.
Puedes encontrar khobz en cada ciudad, cada panadería y cada tienda de comestibles por aproximadamente 1 dirham. A algunos panaderos les gusta además agregar anís, nigella o comino para mejorar sus sabores.
Y es que el pan es tan frecuente y arraigado en la cultura marroquí que muchos ciudadanos no “pueden” comer sin él. A menudo reemplaza los cubiertos y se usa para mojar en salsas y agarrar la carne y las verduras en numerosos platos marroquíes.
9. Maakouda, la delicia bomba de la cocina marroquí.
Maakouda es un delicioso buñuelo de patata crujiente y picante con forma de disco hecho de puré de patatas, mezclado con algunas hierbas y especias, bañado en huevos batidos y posteriormente frito. Es un plato muy típico preparado por casi todas las familias marroquíes.
Se puede servir de diversas formas, como refrigerio o como guarnición acompañando a algún plato principal, aunque para mucha gente acompañada de pan suave fresco y salsa o ensalada picante ya constituyen un buen plato en sí mismo.
Lo bueno es que no tendrás problemas para encontrarlos dado que los restaurantes marroquíes y en muchos puestos de comida callejera siempre tienen este delicioso aperitivo en sus menús. Toda una bomba de sabor que no te puedes perder!
10. ¡Y que no falten los Dulces!
Perfecto con una taza de té de menta y compartido entre amigos, nuevos y viejos, los pasteles marroquíes son ideales para los golosos. Utilizando ingredientes locales que incluyen agua de azahar, agua de rosas, almendras y dátiles en muchas de las recetas, los dulces en Marruecos son irresistibles y abundantes.
Cuernos de gacela, chebakya, Fekkas, Ghoribas, M’hannchas, Cookies de fecha, Briouats de almendras, baklavas.¡La variedad es tan amplia!
Normalmente suelen servirse en ocasiones especiales, como bodas o Ramadán, pero si vas a Marruecos no debes volverte sin haber probado alguno de sus tipos. Eso si, te avisamos que son potentes. Aunque parezca pequeños no te fíes, ingredientes como la miel, el azúcar o los frutos secos hacen que sean super saciantes!
Y hasta aquí este delicioso post sobre estos 10 maravillosos platos típicos marroquíes que no te puedes perder si algún día viajas a Marruecos. Esperemos que el menú haya sido de tu agrado!! ¿Nos vemos en el próximo viaje?