Segunda receta de mi viaje a Londres. La archiconocida Apple Pie, cuya degustación se convirtió en una odisea.
Y es que aunque en cada restaurante y pasteleria por la que pasamos, preguntaba por ella, fue en un pequeño supermercado donde la encontré.
La apple pie, era para mi la tarta clásica que en los dibujos animados de mi infancia, el oso Yogui robaba a los turistas del parque Yellowstone.
Yo tenía la certeza de que era de origen inglés pero que la habían adoptado los americanos. Ahora resulta que leo en algunas webs que en realidad es irlandesa. No sé quien es el autor original, pero al que sea le felicito por su trabajo pues americana, inglesa o irlandesa este pastel es una delicia.
Y tal y como os dije en otra entrada, pretendo recrear las recetas que he probado en mi viaje a Londres, aunque algunas de ellas no sean totalmente británicas.
Ahora vamos a la receta.
INGREDIENTES:
Para la masa:
350 gr de harina
130 gr de mantequilla fría en trozos pequeños
70 gr de agua fría
1 pizca de sal
2 cucharadas de azúcar
1 cucharadita de levadura química
Para el relleno:
2 manzanas (yo he usado del tipo golden)
1 cucharada de canela
2 cucharadas de azúcar
Para acompañar:
Helado de vainilla o yogur, Nata montada (crema de leche)...
PREPARACIÓN:
Primero preparamos la masa, poniendo en el vaso de la thermomix los ingredientes en el mismo orden y mezclamos 15 segundos a velocidad 6. Sacamos la masa, hacemos una bola y la liamos en film transparente. Dejamos en la nevera una media hora.
La sacamos y estiramos con un rodillo, debe quedar fina. Cortamos círculos un poco mas grandes que el tamaño del molde que usemos. Yo la he hecho en moldes individuales.
Los restos de masa, se unen y volvemos a usarla para las tapas.
Colocamos la masa en los moldes y pinchamos con un tenedor. Horneamos unos 15 minutos a 180º. Dejamos enfriar mientras hacemos el relleno.
Cortamos las manzanas a cuadraditos pequeños y las ponemos en un recipiente apto para el microondas. Añadimos la canela y el azúcar y mezclamos bien. Horneamos en el microondas unos cinco minutos, se nos quedará la manzana tierna y muy jugosa.
Ponemos las manzanas en los moldes con la base que habíamos horneado.
Cogemos la masa que había sobrado y volvemos a estirar, cortamos de nuevo círculos lo bastante grande como para que tapen la tarta. Le hacemos un agujerito en el centro y pintamos de huevo y espolvoreamos azúcar por encima.
Al horno, 200º, hasta que la veamos dorada y crujiente.
Dejamos templar y servimos con una bola de helado.
Hacemos la masa, mezclando todos los ingredientes.
Nos quedará como unas migas.
Hacemos una bola y guardamos en la nevera un ratito.
Al cabo de la media hora, sacamos, estiramos entre dos hojas de film. Que nos quede finita.
Cortamos los círculos adecuados para nuestros moldes. Con los restos de masa, se agrupan y se vuelven a usar.
La colocamos en el molde y pinchamos para que no suba mucho. Horneamos.
Vamos con el relleno, cortamos las manzanas, le echamos el azúcar y la canela y al micro unos minutos.
Ya la tenemos lista.
Ahora ponemos el relleno sobre las tartaletas que habíamos horneado.
Tapamos, pintamos de huevo y espolvoreamos azúcar. Al horno.
Cuando la veamos dorada, estará lista.
Fijaros que aspecto tan bueno tiene el corte, con la manzana caramelizada y la masa crujiente...
Hay quien le gusta acompañarla de una bola de helado o de nata montada (crema de leche).
Se toma templada y está de lujo.