Nunca me ha gustado el arroz con leche. Hasta que hace un par de años mi padré me animó a probar el que preparan en una panadería cerca de su casa. ¡Y que rico está!. No es que ahora me vuelva loca por él, claro; la prueba es que solo lo como cuando estamos allí de visita.
Pero desde que empecé a utilizar la Crock-Pot no hago más que leer lo bien que sale. Así que cuando recibí la Crock-Pot pequeña decidí estrenarme con este postre. Esta manera de prepararlo tiene la ventaja de que no tenemos que estar removiendo constantemente, aunque sí hay que estar pendiente de él porque los ingredientes se van añadiendo en fases.
La receta es del libro "Platos típicos de Asturias" de María Luisa García pero para los tiempos he seguido la receta de "La Gata Fartona".
INGREDIENTES:
Arroz: 180 gramos.
Leche: 1 litro.
Azúcar: 6 cucharadas.
Canela en rama: 1 trozo.
Cáscara de un limón.
Mantequilla: 1 cucharada.
Sal: una pizca.
ELABORACIÓN:
Ponemos en la Crock-Pot la leche con la canela, la piel del limón (sin la parte blanca), la mantequilla y la sal. Cocinamos una hora en alto.
Añadimos el arroz, removemos bien y cocinamos otra hora en alto.
Por último, añadimos el azúcar, removemos y dejamos otra hora más en alto.
Lo sacamos de la Crock-Pot y retiramos el limón y la canela.
Servimos con canela en polvo o dorando la superficie con un hierro al rojo vivo.
A mi me gusta que esté más bien seco, así que he ido ajustando las cantidades de arroz hasta llegar a ese punto, pero si lo queremos más caldoso habrá que poner menos arroz.
Fuente: este post proviene de Pan, uvas y queso, donde puedes consultar el contenido original.
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