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- 3 huevos.
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- 6 hojas de gelatina neutra.
- Zumo de medio limón.
- 2 cucharadas soperas de agua.
Elaboración:
En primer lugar, ponemos en un recipiente con agua fría las hojas de gelatina. Mientras se van hidratando, lavamos las fresas y le quitamos lo verde. Las troceamos y las añadimos al vaso de la batidora junto a
El siguiente paso es separar las claras de las yemas. En un cazo a fuego lento batimos las yemas junto con los
Ahora echamos las gelatinas hidratadas y comenzamos a montar la nata (crema de leche). Una vez que la tenemos montada, la unimos a la mezcla con una espátula con movimientos envolventes para que no se nos baje la nata (crema de leche).
A continuación, montamos las claras a punto de nieve y lo juntamos con la mezcla de la misma manera que lo hemos hecho con la nata (crema de leche). El último paso es echarlo en los vasitos o el molde elegido y lo metemos a la nevera hasta el día siguiente.
Pasado este tiempo lo sacamos y lo decoramos con algunas fresas y ya está listo para comer, seguro que os encanta la textura cremosa y esponjosa. Si no os gusta está fruta la podéis cambiar por otra, aunque en un futuro os pondré alguna receta más, ya que este postre lo hice para San Valentín y fue todo un éxito.
Tiempo de preparación: 45 minutos.
Gasto: 4 euros.
Raciones: 8 raciones.
Dificultad: Medio.