Yo soy una fiestera nata (crema de leche) y esta es una de las marchas que no me gusta perderme.
Cada año intento salir al menos una vez para no quedarme con el gusanillo y por supuesto este año también fue así, aunque por los pelos. A punto estuve de perdérmelo pero al final fui con unas amigas al Carnaval de Día y me lo pasé genial.
No viene nada mal "desmelenarse" alguna vez que otra, y digo desmelenarse literalmente. ¿Tú cómo me ves?
Me encantan los disfraces de "mala" ¿Tú no crees que siempre el vestuario de la mala de la película es mucho más impresionante que el de la buena? ¿O es que me lo parece a mí?
Esperando estoy a que se estrene Cenicienta para echarle el ojo al "ropero" de la madrastra jejejeje.
Bueno, a lo nuestro. La receta de hoy surgió para aprovechar unos higos que tenía en la despensa, aunque en realidad lo que tenía en mente era hacer un parfait de higos como el que comí hace un par de meses con unas amigas.
El caso es que el tiempo aún no está para cosas frías y lo que me apeteció en realidad fue disfrutar del calor y el olor de preparar un buen bizcocho en el horno.
Este fue el resultado final.
Para prepararlo necesitaremos:
200 grs. de azúcar
3 huevos medianos
250 grs. de harina integral
1 sobre de levadura en polvo
200 ml. de leche
60 grs. de aceite vegetal
80 grs. de higos secos
1/2 vaso de vino de Madeira
Para el glaseado:
150 grs. de azúcar glas
2 ó 3 cucharadas de vino de Madeira
Lo primero que haremos será trocear los higos y ponerlos a rehidratar en el vino durante unos 20 minutos.
Cando ya estén pondremos a precalentar el horno y preparamos el molde que vayamos a utilizar , engrasándolo si fuera necesario.
Batiremos los huevos con el azúcar hasta que estén espumosos.
Añadimos el aceite, la leche y el vino.
Tamizamos la harina con la levadura y lo incorporamos a la mezcla.
Por último añadimos los higos y mezclamos para distribuirlos bien.
Vertemos la mezcla en el molde y horneamos a 180º durante unos 45-50 minutos (dependiendo del horno).
Cuando comprobemos que está listo sacamos y dejamos entibiar antes de desmoldarlo y dejarlo enfriar sobre una rejilla.
Preparamos el glaseado mezclando el azúcar con el vino y pintamos el bizcocho con él.
¡Y a disfrutarlo!
? Porque tienes que saber que por dónde pasa él no hay vencidos ni vencidas ?
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