Esta vez tocaba un bizcocho. Ideal para acompañar el café de las mañanas. Éste es de leche evaporada, una leche concentrada de textura más cremosa que la habitual y más ligera que la nata (crema de leche).
Es uno de los bizcochos más suaves y jugosos que he probado. Y además lo he utilizado para aprovechar la crema pastelera que me sobró en la receta anterior. Esto mismo también lo hice con este otro bizcocho. Así que, si el bizcocho está bueno de por sí, con este añadido, el resultado es espectacular: cuando metes el trocito de bizcocho en la boca es una auténtica delicia. Esto si que es empezar el día con alegría!!!!!!!!
Queda buenísimo. Os animo a hacerlo. Ingredientes:
4 huevos medianos
250 gr. de azúcar
70 gr. de aceite de girasol
200 gr. de leche evaporada
La ralladura de un limón
250 gr. de harina tamizada
12 gr. de levadura para repostería
Una pizca de sal
Azúcar glas para adornar
Un poco de mantequilla para engrasar el molde
Necesitas un molde desmoldable de 20 ó 22 cm de diámetro.
Preparación tradicional:
1. Precalienta el horno a 170ºC, calor arriba y abajo.
2. Engrasa el molde con mantequilla.
3. Separa las claras de las yemas. Reserva las claras en un cuenco aparte.
4. Pon el azúcar y la leche evaporada en un cuenco. Bate con la máquina de varillas durante cinco minutos hasta obtener una crema.
5. Sin dejar de batir echa en el cuenco las yemas, el aceite de girasol y la ralladura del limón.
6. Añade la harina tamizada y la levadura. Bate sólo hasta que esté mezclado. Reserva.
7. Añade una pizca de sal a las claras y móntalas a punto de nieve hasta que estén firmes.
8. Incorpora las claras a punto de nieve a la masa que tenemos reservada y termina de mezclar con una espátula, con movimientos envolventes hasta conseguir una masa esponjosa.
9. Vierte la masa en el molde. En este punto es donde yo añadí la crema pastelera por encima. Ella sola por su peso se baja a la base del molde.
10. Hornea durante unos 35 ó 40 minutos. Pincha en el centro para ver si está bien hecho.
11. Saca a una rejilla. En cuanto se temple, desmolda y espolvorea con azúcar glas con la ayuda de un colador.
Preparación en thermomix:
1. Precalienta el horno a 170ºC, calor arriba y abajo.
2. Engrasa el molde con mantequilla.
3. Separa las claras de las yemas. Reserva las claras en un cuenco aparte.
4. Monta la mariposa. Pon la leche evaporada y el azúcar en el vaso y programa 10 minutos a velocidad 3½.
5. Cuando hayan transcurrido los primeros 5 minutos añade por el bocal las yemas, el aceite de girasol y la ralladura de limón, y deja que termine el tiempo programado.
6. Añade la harina y la levadura. Programa 10 segundos a velocidad 6. Reserva esta masa espesa en un cuenco.
7. Limpia y seca el vaso. Monta la mariposa de nuevo y echa las claras con una pizca de sal. Programa velocidad 3½, sin tiempo ni temperatura, hasta que estén montadas, aproximadamente unos 7 minutos.
8. Incorpora las claras a punto de nieve a la masa que tenemos reservada y termina de mezclar con una espátula y movimientos envolventes hasta conseguir una masa esponjosa.
9. Vierte la masa en el molde. En este punto es donde yo añadí la crema pastelera por encima. Ella sola por su peso se baja a la base del molde.
10. Hornea durante unos 35 ó 40 minutos. Pinchar en el centro para ver si está.
11. Saca a una rejilla. En cuanto se temple, desmolda y espolvorea con azúcar glas con la ayuda de un colador.
Y a disfrutar!!
FUENTE: "Webos fritos"
Fuente: este post proviene de Repostería de tía Paqui, donde puedes consultar el contenido original.
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