Hoy vengo con receta dulce. Bueno, dulce pero sin azúcar! Y sin lactosa! De hecho sin leche, con bebida de almendras. Y además con poca grasa y mucha proteína y fibra. Para un desayuno sabroso y también sano, de esos que me gustan a mí. Para disfrutar y llenarte de energía desde bien pronto por la mañana. Oye, que de merienda también está estupendo, eh?! :) Para lo que más os apetezca es ideal, muy, muy sabroso (ese limón!!!!) y esponjoso, y totalmente indulgente. No se puede pedir más :)
INGREDIENTES
250 gramos de harina de avena
250 gramos de azúcar o edulcorante equivalente en igual cantidad (en mi caso eritritol)
3 huevos
125 ml de bebida de almendra sin azúcares añadidos (u otra leche de elección)
100 gramos de puré de manzana (sin azúcar añadido)
15 gramos de levadura química
Ralladura de 1 limón de buen tamaño
2 cucharaditas de semillas de amapola
PREPARACIÓN
- En un bol batimos los huevos, con el azúcar, la leche, el puré de manzana y la ralladura de limón.
- A continuación, mezclamos la harina y la levadura y la añadimos al primer bol tamizándola poco a poco. Volvemos a batir hasta obtener una masa homogénea y sin grumos.
- Por último, añadimos las semillas de amapola y mezclamos bien.
- Colocamos la masa en un recipiente apto para horno previamente engrasado y horneamos a 180º C unos 40 minutos, hasta que esté dorado y cocido por dentro (podemos asegurarnos pinchando en el centro con un palillo. Cuando el bizcocho esté listo el palillo saldrá completamente listo).
- Una vez fuera del horno, esperamos unos minutos para que no queme, desmoldamos y dejamos que enfría totalmente sobre una rejilla. Ya veréis que rico queda!
Qué lo disfrutéis! :)
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