Diseño de Freepik y adaptado por Delia Carballo
¡Este año se celebra el Amigo Invisible Gastronómico por séptima vez! La verdad es que es una pasada como una iniciativa entre conocidos termina siendo algo multitudinario a nivel nacional.
Este año lo vuelve a organizar Jess, de Decogalletas, al igual que el año pasado y es que después de la pasada experiencia, ¡apetece repetir!
Es el primer año que participo y aunque a duras penas tengo tiempo para publicar algo (han pasado más de 2 semanas desde mi última publicación) me hace mucha ilusión formar parte de esto.
Para los nuevos como yo no hay mucho que contar, se trata de un amigo invisible normal y corriente solo que entre blogueros y blogueras. Por sorteo te toca alguno de los blogs también se ha apuntado y tienes el deber de hacerle tres regalos: algo del ámbito gastronómico hecho por ti, un regalo que hayas comprado (también relacionado con el mundillo) y un regalo algo más personal (una carta, una postal, algún detalle...).
Teóricamente debería haber publicado esta entrada hace una semana, pero ya os digo: prácticas de cocina por un lado, prácticas de carnet de conducir por otro, trabajos del grado por entregar y otros mil quehaceres y compromisos... Y me pongo a escribir esto a la 1:50 de la mañana al recibir el correo de Jess señalándome mi amigo invisible.
Mi obligación para facilitar el trabajo a quién me haga el regalo es señalar un poco mis gustos, mis preferencias o lo que realmente me gusta o deja de gustar.
Pues es bastante fácil: Adoro los libros de cocina y los de repostería, sobretodo estos últimos y disfruto con casi cualquier tipo. Me contento con moldes de cakes, moldes de bombones, utensilios, ingredientes, herramientas... Cualquier cosa útil. Lo único que no me entusiasma nada es el fondant y todo lo que rodea el mundo del diseño de este tipo de pasteles de fiesta.
De comer y para cocinar me gusta casi todo, sería mucha muchísima muchisisisisima casualidad que me regalaran algo que desprecio.
Casi prefiero afirmar que el mundo dulce me tira más pero no tengo ningún problema con todo lo demás. Yo creo que quedaré agradecida con cualquier cosa.
En mi entrada sobre el premio Best Blog escribí bastante información sobre mí, por si cabe cotillear algo más.
Así que dicho esto cambio de tema.
Este es el MEJOR bizcocho de naranja que he probado yo y todos los que han pasado por aquí. Es ultra jugoso, nada denso, aireado, la miga se rompe y se deshace en la boca, ¡literal!
No exagero si os digo que en dos semanas igual lo he hecho 5 veces y a cada cual mejor. Y tiene una particularidad que es que se hace con una naranja entera. ENTERA. Ni ralladura ni zumo. Entera.
Las primeras veces la hacía con la Thermomix y es de un recetario de estos casi arcaicos de las primera THX, pero se puede hacer modo manual y ahorro ensuciar el vaso.
He hecho algunas pruebas y cambios que ya específico. Si tenéis una naranja a mano y algo para batir solo os hace falta 15 minutos.
Ingredientes:
1 naranja (o 3 mandarinas pequeñas)
1 huevo y 2 yemas (o 2 huevos y una yema) como os sea más cómodo. No hay diferencia en el resultado
250 gr. de azúcar
1 yogur natural normal
100 gr. de aceite de girasol
220 gr. de harina
2,5 cditas. de levadura química
Chocolate a cantidad para cubrir (yo uso una tableta de 150 gr. entera)Preparación:
Precalentar el horno a 180ºC.
Cortar la naranja (o mandarinas) a trozos, bien limpia y CON LA PIEL. Toda entera. Triturarla junto con el azúcar y los huevos (con el Túrmix, una batidora, la THX, lo que sea...).
Añadir el yogur y el aceite y batir de nuevo.
Por último añadir la harina, la sal y la levadura y dar un último batido.
Hornearlo entre 35-45 minutos, dependiendo del molde.
Yo he hecho varias pruebas: molde loaf cake (el alargado), molde redondo y molde angel food (que es el de las fotos), y éste último ha sido el mejor para mí, pero es indiferente. Con éste me tarda 45 minutos, con los otros unos 35-40, se trata de ir pinchándolo hasta que salga limpio.
MUY IMPORTANTE: desmoldarlo frío porque con lo tierno que es se rompe a la mínima cuando aún está caliente.
Una vez frío (o no...) cubrirlo con el chocolate fundido. A mí me gusta poner solo chocolate porque luego se endurece y queda una costra dura. Si os gusta que quede semi-líquido o fundente podéis ponerle crema de leche y algo de mantequilla.
Yo tampoco entiendo esa aureola ahí en medio :P
Mucha suerte con vuestros regalos a los que participáis y muchos besitos a todos;)^^