Créeme que vale la pena probarlo. Sin duda en mi casa se va a convertir en un clásico para los desayunos y meriendas. En esta ocasión lo he hecho con aroma de limón, pero ya estoy pensando en repetirlo con cacao, porque con sabor a chocolate seguro que también triunfa.
Una de las características a destacar de este bizcocho es su elaboración con harina de trigo sarraceno, también conocido como alforfón, que aunque por el nombre pueda parecer un cereal no lo es. Lo mejor es que no tiene gluten, por lo que tenemos un bizcocho que también será apto para celíacos.
Otro punto fuerte es que al emplear azúcar de coco lo hacemos más saludable que con azúcar refinado (que no nos aporta nada más que calorías vacías). Si queremos hacer la receta todavía más sana, siempre podemos sustituir el aceite por crema de dátiles o por estevia (aunque cambiarán las cantidades).
Ingredientes
250ml. leche vegetal (la que prefiramos: almendras, avellanas, coco, avena...)
200gr. azúcar de coco
120ml. aceite suave
Ralladura de 1 limón
220gr. harina de trigo sarraceno
9gr. levadura para hornear
chips de chocolate (opcional)
Mezclamos la leche con el azúcar.
Añadimos la ralladura de limón y el aceite.
Finalmente añadimos la harina mezclada previamente con la levadura. Batimos bien con unas varillas.
Preparamos un molde de horno embadurnado con aceite y harina.
Vertemos la mezcla en el molde y horneamos a 180ºC unos 45 minutos. Cuando al clavar un palillo salga limpio estará listo el bizcocho. Retiramos, dejamos enfriar y ya podremos disfrutar.