Reconozco que hasta que no empecé con el blog no le di importancia a las redes sociales a nivel personal. Tenía perfiles abiertos pero no solía usarlos. Profesionalmente sí han sido parte de mi día a día, y posiblemente por sentir la presión de alcanzar los objetivos de la empresa para la que trabajaba, no me había preocupado de los míos. Ya se sabe, en casa del herrero cuchillo o cuchara de palo (nunca sé cuál es el correcto).
Pero cuando me tomé esto de buscar alternativas al trigo común y al azúcar medio en serio y empecé con el blog, decidí unirme a grupos y comunidades para ver ideas y comentar dudas. Participo en varios de pan, panificadora, vegetarianos o de comida consciente, pero también de comida en general sin ser de temas tan específicos. Como mis ganas de cocinar van unidas al mundo de la Thermomix, uno de los primeros sitios en los que empecé a investigar es en la comunidad “Cocinar con Thermomix” que regentan divinamente la bloguera Rosa Ardá y sus colaboradoras.
Allí hay personas que cada día aportan sus experiencias, preguntan dudas y entre todos siempre se encuentran las soluciones más adecuadas. Gracias a todas sus buenas ideas en mi casa nos pasamos el día probando cosas nuevas como este bizcocho de trigo sarraceno con plátano cuya primera receta creo que es originaria del blog Thermorecetas, aunque en la comunidad hicieron la prueba cambiando la harina por trigo sarraceno y yo le he añadido un par de modificaciones más.
El azúcar lo he cambiado por ágave como hago habitualmente y como no tenía bastante plátano completé con un albaricoque maduro. Otra de las cosas interesantes de este bizcocho es que es para celíacos ya que el trigo sarraceno “ni es trigo ni es na”. Bueno algo sí que es, es una planta aunque el nombre lleve a equivocación y no tiene nada de gluten.
Y más cosas que hace que este bizcocho se pueda hacer en esta ola de calor. Está horneado en la panificadora, pero no en la cubeta de la máquina. Está hecho en un molde de plumcake de esos baratujos comprado en el chino. Y no, la idea no ha sido mía, pero sí que la he sacado de otro de los grupos que sigo en Facebook. Gracias a Salomé Hurlé que hizo la prueba con este maravilloso bizcocho de limón, yo sigo horneando sin necesidad de morir achicharrada.
Para hacerlo en un molde grande doblar cantidades de todos los ingredientes
Ingredientes
– 2 huevos
– 1 plátano y medio (yo 1 plátano + 1 albaricoque)
– 75 gr. de sirope de ágave
– 35 gr. de aceite de girasol o de oliva
– 1/2 sobre de levadura (yo un poco más, eran 9 gr,)
– 100 gr. de trigo sarraceno
– 1 pizca de sal
Modus Operandi
1) Mezclar el plátano con los huevos, sirope ágave y aceite. Lo puedes hacer con batidora, varillas o Thermomix unos segundos a V.5.
2) Añadir la harina de trigo sarraceno con la levadura y la pizca de sal. Envolver e integrar con la varilla o unos segundos a V.3.
3) Engrasar el molde y verter la mezcla. Meter el molde en la panificadora sobre la resistencia directamente una vez quitada la cubeta. Poner el programa de horneado, en la del Lidl es el 12. Sacarlo antes de que termine el programa ya que se hace antes, el mío a los 35-40 minutos ya estaba. Esta panificadora no tiene opción de modificar ni el tiempo ni la potencia así que hay que estar mirando porque se quema rápido por los extremos. Estoy pensando para los próximos ponerle papel de hornear en los laterales tal y como lo hace Salomé en su receta.
Como después de comerte este bizcocho te sentirás ligero como una pluma podrás ponerte a saltar este temazo de la banda de California “The Knack”. Igual por el nombre de la banda no les identificas pero si te digo que la canción se llama “My Sharona” seguro que hasta la podrías tararear. Yo no conocía la cara del cantante y acabo de flipar, no me digáis que no es igual que Messi. El futbolista podría teletransportarse al año 1979 y seguiría siendo igual de moderno que ahora. Ahora o entiendo todo.