Este mes el ingrediente estrella era el Kirsch (licor de cerezas). Estaba de suerte. Una vez en el super ví un pack con 10 botellitas de licores variados para repostería y entre ellos estaba el Kirsch. Además que ya lo había utilizado para otra receta Rüeblitorte en nuestro viaje de #reposterasporeuropa con destino a Suiza.
Lo primero que asocié con este ingrediente, cerezas, chocolate, ... ahhhhhh la famosa Tarta Selva negra, Pero no, no me veo capacitada para hacer tal maravilla. Así que he improvisado y tomando como base el chocolate, he tuneado la receta del Brownie que hago normalmente y le he añadido las cerezas y el kirsch.
Bueno y el resultado espectacular y por eso lo comparto con tod@s vosotr@s. Un saborcillo rico, rico. Un acierto al 100%.
Era la primera vez que lo hacía así y "pagué" la novatada. Las cerezas las partí por la mitad y las repartí por encima de la masa. Pensé que no se hundirían porque el brownie al no llevar levadura no crece. Grave error por mi parte, la gran mayoría de cerezas han terminado atrapadas entre la masa, jijijiii y la decoración se me ha ido un poco al traste. Se nota los agujeros pero no se ve el colorido rojo en el exterior, solo en el corte.
Yo he utilizado la receta que normalmente hago para el brownie. Lo único que he añadido las cerezas maceradas en el kirsch.
He utilizado un bote pequeño de cristal de cerezas en almíbar. He vaciado la mitad del líquido y he vuelto a terminar de llenar el botecito con el kirsch. Si queréis podeis vaciarlo todo y lo volvéis a rellenar solo de licor. He dejado macerando las cerezas en la nevera de un día para otro.
Para el brownie:
Partir en trozos el chocolate y la mantequilla. Lo he puesto en un recipiente apto para el microondas y he ido poniendo 30" a 30" hasta que he visto que estaba bastante deshecho. Luego mezclando con una cuchara y el calor residual se ha terminado de deshacer y así no hay peligro que el chocolate se queme.
Batir con las varillas manuales los huevos hasta que espumen. Añadir el azúcar y mezclar. Incorporar la harina poco a poco para que no queden grumos e ir mezclando. Escurrir las cerezas que teníamos en la nevera y el líquido resultante incorporarlo a la masa, junto el chocolate reservado y opcionalmente nueces troceadas si os gustan.
Volcar el preparado en una bandeja con papel de hornear. Dar unos golpes secos a la bandeja para que se reparta uniformemente la masa. Decorar con las cerezas maceradas y al horno. A 170º durante unos 25-30".
Bon profit !!!
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