El brownie es un pastel que me encanta y habitualmente se hace con nueces pero por variar hemos hecho esta versión con cacahuetes, también conocido como maní, para darle un toque diferente. Este pastel es una delicia ya se coma así, tal cual, o como lo suelen servir en restaurantes con una bola de helado de vainilla por encima y salsa de chocolate caliente, ya verás que rico está. Además, este brownie de cacahuetes es uno de los pasteles mas sencillos y fáciles de hacer, no necesita levadura ni tiempo de reposo ni levado, se tiene listo enseguida y se hornea en poco rato. Hemos hecho una versión bastante parecida a la original aunque con algunas variaciones para hacerlo mas personal.
Brownie de cacahuete
Ingredientes
300 g de chocolate negro de postres
200 g de mantequilla
200 g de azúcar
4 huevos grandes
140 - 150 g de cacahuetes salados
100 g de harina
Preparación del brownie de cacahuete:
En un cazo ponemos el chocolate y la mantequilla, ambos troceados, lo vamos a calentar al baño María hasta que se haya deshecho mientras lo vamos removiendo, no hace falta que se caliente mucho, tan solo que se deshaga.
Cuando lo tengamos lo dejamos templar y añadimos el azúcar, lo removemos hasta que se haya integrado bien, utilizando mejor unas varillas manuales.
Una vez esté integrado vamos a ir incorporando los huevos, de uno en uno, hasta que los hayamos añadido todos mientras lo vamos removiendo, siempre utilizando las varillas manuales para no introducir demasiado aire.
Entonces vamos a añadir la harina y a removerlo para mezclarlo bien, una vez lo tengamos añadimos también los cacahuetes, que le podemos poner mas o menos al gusto de cada uno.
Preparamos un molde con papel de horno o lo untamos de mantequilla, mejor si es ancho y no muy alto, como un molde rectangular por ejemplo.
Precalentamos el horno a 180º y horneamos unos 30 minutos. Es muy importante no pasarnos del tiempo porque nos podría quedar duro, comprobaremos con un palillo que está bien hecho por el centro y lo sacamos enseguida del horno.
En cuanto podamos lo sacamos del molde y lo dejamos enfriar sobre una rejilla. Si te gustan mas otros frutos secos los puedes utilizar, imagino que estará muy rico también con avellanas, por ejemplo, o con las clásicas nueces.
Fuente: este post proviene de Dulces Sueños, donde puedes consultar el contenido original.
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