Hacía mucho tiempo que no hacía un Bundt Cake y con lo espectacular del resultado pienso que debería hacerlos más a menudo. Además aceptan casi cualquier ingrediente por lo que las posibilidades son realmente infinitas. En este caso, los ingredientes no me pueden gustar más. Café, chocolate, nueces y por supuesto el siempre acertado toque de la vainilla hacen de este Bundt Cake un espectáculo de sabores y texturas.
No he podido evitar ojear una vez más el libro de El rincón de Bea para inspirarme. Así que cuando llegué a la página de su Mocha & Walnut Bundt Cake dejé de pasar páginas y después de leerme la receta, lo que hice después ya lo estáis viendo en esta entrada
Hice algún cambio según fui haciendo la receta, que también os cuento ahora.
INGREDIENTES: (para un molde de 25 cm.)
280 gr. de mantequilla
285 gr. de azúcar
4 huevos
315 gr. de harina
1 y 1/2 cucharadita de levadura química tipo Royal
1 cucharadita de sal
85 gr. de nueces picadas
80 gr. de chocolate para postres
2 cucharadas de cacao en polvo
60 ml. de café
1 cucharadita de café soluble
2 cucharaditas de extracto de vainilla
250 ml. de buttermilk (puedes hacerlo tú mismo, mezclando 250 ml. de leche con dos cucharadas de zumo de limón o vinagre y dejándolo reposar 10 minutos)
ELABORACIÓN:
En un cazo ponemos al baño maría el chocolate, 30 gr. de mantequilla, el café y el café soluble y dejamos que se derrita y se integren bien todos los ingredientes. Reservamos.
Precalentamos el horno a 175ºC. y engrasaremos con spray desmoldante un molde Bundt.
Tamizamos juntos la harina, la sal y la levadura.
Batimos juntos el resto de la mantequilla junto con el azúcar, hasta obtener una mezcla esponjosa y que haya blanqueado ligeramente.
Bajamos la velocidad y vamos a ir añadiendo los huevos uno a uno y ligeramente batidos. Esperaremos a que se integre uno antes de añadir el siguiente. Cuando hayamos terminado de añadir todos los huevos, añadimos el extracto de vainilla.
Ahora subimos un poco la velocidad y comenzamos a añadir la harina a cucharadas, de una en una hasta añadir aproximadamente la tercera parte. Alternamos entonces con el buttermilk echando la mitad de éste. Continuamos añadiendo otro tercio de la harina, cuando esté integrada en la mezcla añadimos el resto del buttermilk y terminaremos entonces con el resto de la harina.
Añadimos las nueces y paramos la máquina.
Dividimos la masa y en un bol echamos un poco menos de la mitad. Añadimos entonces el chocolate derretido y el cacao en polvo y mezclamos bien con una espátula hasta que se integren bien todos los ingredientes y obtengamos un color uniforme.
En el molde echamos primero la mezcla que no tiene chocolate y alisamos la superficie con una espátula antes de añadir la mezcla con chocolate.
Horneamos durante 50 minutos o hasta que al pincharlo con un palito, éste salga completamente limpio.
Sacamos el molde del horno y lo dejamos reposar sobre una rejilla durante 10 minutos. Pasado este tiempo, desmoldamos y dejamos que se enfríe completamente sobre la rejilla.
ALGUNAS ACLARACIONES:
Si observas que la mezcla se te corta mientras estás añadiendo los huevos es por la diferencia de temperatura de los ingredientes. No te preocupes porque en cuanto añadas la harina, la mezcla volverá a tener una consistencia cremosa y uniforme.
Puedes omitir el cacao en polvo. Yo lo añado para obtener un color y sabor más intenso a chocolate.
El buttermilk lo puedes sustituir en este caso por leche.
Fuente: este post proviene de este blog, donde puedes consultar el contenido original.
¿Vulnera este post tus derechos? Pincha aquí.
Modificado: