Hoy os traigo un bizcocho de plátano, una receta de aprovechamiento para dar salida a esos plátanos que se nos empiezan a estropear, ya que están muy maduros..
Una sencilla receta que resulta de los más sabrosa y perfecta tanto para el desayuno como para la merienda, y con todos los beneficios que nos aportan los plátanos. El plátano resulta de mucha ayuda para recuperar fuerzas gracias al potasio, se demuestra efectivo disminuyendo la hipertensión arterial, combate el estreñimiento, reduce la acidez y el ardor de estómago
INGREDIENTES (para un molde de 10 tazas o 2,3 litros)
275 g de harina de trigo todo uso
250 g de mantequilla a temperatura ambiente
160 g de azúcar panela
3 plátanos pequeños (unos 260g aprox.)
3 huevos M
2 yogures naturales sin azúcar añadido
65 g de nueces pecanas
1 cucharada de pasta de vainilla
1+1/2 cucharadita de bicarbonato
1 pizca de sal
ELABORACIÓN
Precalentamos el horno a 170º y engrasamos el molde (yo lo engraso con éste spray desmoldante)
Trituramos los plátanos hasta hacerlos puré, reservamos.
Tamizamos la harina, el bicarbonato y la sal, reservamos.
En el bol de la batidora (en mi caso el de la KitchenAid) ponemos la mantequilla a temperatura ambiente y el azúcar panela, y con el accesorio pala mezclamos unos 5 minutos a velocidad 3-4 hasta conseguir una mezcla esponjosa.
Sin dejar de batir, añadimos los huevos de uno en uno y seguidamente añadimos la pasta de vainilla.
Bajamos a velocidad 2 y añadimos el puré de plátano, seguido la mitad de la harina, luego los 2 yogures y finalmente el resto de la mezcla de la harina, y batimos hasta conseguir una mezcla homogénea. Añadimos las nueces pecanas y mezclamos con la ayuda de una espátula hasta que se integren en la masa.
Vertemos la mezcla en el molde que teníamos previamente engrasado y lo llevamos al horno unos 45-50 minutos, o hasta que el insertar una brocheta, ésta salga totalmente limpia.
Una vez saquemos del horno, lo dejamos enfriar dentro del molde unos 15 minutos. Pasado ese tiempo, desmoldamos con cuidado y dejamos enfriar por completo sobre una rejilla.
Ya tenemos listo nuestro bizcocho para el desayuno o la merienda.
Espero vuestra opinión, ya sabéis que me encanta leeros, muaksssssss.