Uno de los ingredientes que utilicé para preparar este postre fue la crema marrón glacé pero es que tenía que darle salida como fuera, hace 15 días preparé los cake pops de galleta y marrón glacé al caramelo y cuando fuí a comprar esta crema debí de pensar que se acababa el mundo porque no se ni cuántos tarros me traje para casa, ainshhh ..., menos mal que está tan rica que se puede comer hasta a cucharadas porque si no menudo derroche hubiera hecho.
Pues nada, como el tiempo dicen que es oro, no lo vamos a malgastar, así que nos ponemos el delantal y a la faena.
TIPS:
Salen 6 unidades
Temperatura del horno: 200ºC con calor arriba y abajo
Conservación: en una lata metálica
INGREDIENTES:
1 masa de hojaldre rectangular
azúcar glas
250 g de crema marrón glacé Deluxe
trocitos de marrón glacé Deluxe (opcional)
250 ml de nata (crema de leche) para montar 35% M.G.
30 g de ron
2 hojas y media de gelatina
1 huevo (para pintar)
almendras laminadas (para decorar)
MODO DE PREPARACIÓN:
Comenzamos preparando la mousse porque tiene que enfriar.
Hidratamos las hojas de gelatina en un bol con agua fría.
Montamos la nata (crema de leche) hasta que haga picos bien firmes y reservamos en la nevera.
En un cazo a fuego medio ponemos el ron, las hojas de gelatina hidratadas y escurridas y 2 cucharadas de crema marrón glacé. Removemos hasta que se disuelva la gelatina y se integren bien todos los ingredientes.
Retiramos el cazo del fuego y añadimos el resto de la crema marrón glacé sin dejar de remover hasta que se funda completamente.
Con movimientos envolventes incorporamos la nata montada (crema de leche).
Dejamos reposar un rato en la nevera, con 30 minutos es suficiente.
Precalentamos el horno.
Sin retirar el papel con el que viene envasado extendemos el hojaldre y le pasamos un poco el rodillo por encima con cuidado para que no pierda su forma rectangular.
Si te gustan las cosas muy dulces puedes espolvorear con un poco de azúcar glas volviendo a pasar el rodillo por encima.
Pasamos la masa de hojaldre a una hoja de papel vegetal un poco más grande. Con un cortador de pizza cortamos en 6 rectángulos iguales y pinchamos toda la superficie con un tenedor.
Ponemos la masa (sin quitar el papel vegetal) sobre la bandeja del horno y vamos poniendo encima de cada rectángulo un poco del mousse. Si te apetece, también se pueden poner algunos trocitos de marrón glacé para que las cañas tengan tropiezos.
Pintamos los bordes con huevo batido y doblamos por la mitad de manera que queden bien pegados, presionamos un poco y con ayuda de un tenedor damos unos cortes a modo de flequillo para ayudar a que las cañas queden bien selladas, de lo contrario se saldría todo el relleno.
Pintamos las cañas con el resto del huevo batido y ponemos por encima almendras laminadas.
Horneamos durante unos 15 o 20 minutos, hasta que veamos que las cañas están doradas.
Dejamos que se enfríen un poco, pasamos a una rejilla y espolvoreamos con azúcar glas.
Si te sobra mousse lo puedes poner en vasos o copas y a la nevera. A la hora de servir puedes ponerles un poquito de almendra crocanti por encima.
Listas nuestras cañas de hojaldre rellenas con mousse de marrón glacé, aunque todavía puedes hacer la receta más fácil si en vez de preparar la mousse rellenas las cañas directamente con la crema marrón glacé tal cual viene.
Y si no te gusta esta crema y tampoco te quieres complicar, siempre puedes comerte unas castañas asadas que acompañadas de un vaso de leche también están muy ricas.