Ya tocaba algo salado, he atiborrado el blog de recetas dulces, pero en estas fechas es inevitable. Ahora las próximas entradas serán saladas, no muchas, que la cabra tira para el monte y lo mío es la repostería.
Este plato es estupendo para estos días de atracones. Algún día tendremos que volver a la normalidad culinaria y a mi me ha parecido estupenda esta receta para ir aclimatando el cuerpo a esa rutina.
Es un plato de pasta, con una salsa carbonara especial, por que no lleva bacon, sino verduras. Y a pesar de eso está riquísima. probadla, porque vale la pena.
Encontré la receta en la página directo al paladar, aunque he modificado la receta en cantidades y he quitado y añadido algunos ingredientes.
Os dejo mi versión.
INGREDIENTES PARA CUATRO PERSONAS:
50 gr de queso parmesano.
1 cebolla pequeña.
1 zanahoria grande.
1 calabacín.
50 gr de champiñones laminados.
1 yema de huevo.
30 gr de aceite de oliva virgen.
Sal y pimienta al gusto.
300 gr de pasta (macarrones, espaguetis, tallarines?)
PREPARACIÓN:
Primero rallamos el queso 10 segundos a velocidad 8 y lo reservamos.
Pelamos y cortamos el calabacín y la zanahoria en bastoncitos y la cebolla en rodajas.
Ponemos en el vaso el aceite y agregamos la zanahoria en bastoncitos y la cebolla a rodajas. Lo sofreímos 6 minutos, varoma, velocidad 2.
Una vez sofrita estas verduras que son las más duras, añadimos los bastones de calabacín y el champiñón laminado, sazonamos con sal y pimienta al gusto y volvemos a sofreír cinco minutos más a 100º, velocidad 2.
Mientras se hacen las verduras vamos cociendo la pasta como tengamos costumbre.
Cuando se acaben de hacer las verduras incorporamos la leche evaporada, la yema de huevo y el queso rallado. Mezclamos todo durante un minuto a velocidad 3.
Servimos caliente sobre la pasta.
Podéis hacer esta receta en una sartén. Primero colocamos el aceite y pochamos las zanahorias y la cebolla unos cuatro o cinco minutos,
Cuando las tengáis pochadas agregamos el calabacín y los champiñones. Sazonamos y dejamos que se hagan unos minutos más. Cuando lo veamos todo bien hecho, añadimos la leche evaporada, el queso y la yema de huevo y calentamos un minutos sin dejar de remover.
Vamos a rallar el queso, he usado el parmesano pero podéis poner otro cualquiera, emmental, manchego...
Una vez rallado lo reservamos.
Preparamos las verduras.
Primero pochamos la zanahoria y la cebolla que son algo más duras.
Aquí ya están casi listas.
Ahora agregamos el calabacín y los champiñones y sazonamos.
Cuando las verduras están listas, incorporamos el queso, la yema y la leche evaporada. Pondemos poner nata (crema de leche), pero así es más ligero. Si lo queréis más ligero aún, en lugar de leche evaporada agregamos yogur griego sin azúcar.
Mezclamos todo y listo.
Mientras se van haciendo las verduras preparamos la pasta, para tener todo a la vez.
Servimos la pasta con la salsa por encima. Calentita y recién hecha.
Un platito de pasta con verduras al que nadie se va a poder resistir.
Quince minutos se necesitan para hacer este plato. No me digáis que es complicado.
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Fuente: este post proviene de Tapitas y postres, donde puedes consultar el contenido original.
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