Los ingredientes que vamos a necesitar son:
400 g de carne de ternera para guisar
200 g de champiñones
1 cebolla pequeña
2 guindillas frescas
1 vaso de vino blanco
Aceite suave
Sal
Pimienta
Unas gotas de Tabasco (si quieres que esté más picante)
Lavamos los champiñones muy bien y les retiramos el pie, que suele llevar restos de tierra. Los cortamos en mitades. Ponemos a calentar una cacerola con agua y sal y cocemos los champiñones durante quince minutos desde que el agua rompe a hervir.
Picamos la cebolla muy pequeña, y las guindillas en láminas conservando las semillas (que son las que pican). Ponemos a calentar un poco de aceite en un wok o una sartén honda y cuando haya cogido temperatura doramos la cebolla. Incorporamos la guindilla y dejamos que se vaya cocinando a fuego fuerte.
Salpimentamos la carne y la añadimos a la sartén. Cuando empiece a tomar color por todos los lados echamos los champiñones cocidos, el vino y un vaso de caldo de la cocción del champìñón. Dejamos que hierva mientras corregimos de sal. Si queremos que pique más utilizaremos el Tabasco.
Cuando haya reducido al menos hasta la mitad lo servimos. Es preferible comerlo mientras todavía está caliente.