Hay tapas a las que uno simplemente no se puede resistir... y quizás la tapa que más nos representa sea el típico pincho de tortilla por toda España. Pero en mi caso, mi perdición son los calamares o chipirones fritos, es olerlos y me entra un hambre.
En muchos bares ponen las típicas rabas de calamar, achicladas y un poco insustanciales. Que a mí no me hacen ninguna gracia. Por ese motivo los calamares fritos solemos hacerlos en casa para cenas de tapeo, son sencillos y salen muy ricos.
INGREDIENTES:
CHIPIRONES FRESCOS
ACEITE PARA FREÍR
HARINA DE TRIGO NORMAL
SAL FINA
OLIVAS VERDES
CERVEZA ARTESANA GAMUS GINGER PALE ALE
PARA LA SALSA ALIOLI
1/2 DIENTE DE AJO
1 HUEVO
SAL
VINAGRE
ACEITE DE OLIVA
PORCELANA PORVASAL
- Empezaremos por lo más divertido, limpiar y lavar los calamares.
- Sujeta la cabeza del calamar con tu mano diestra y el cuerpo con la otra. Tira de la cabeza con suavidad para ir separando las
vísceras del cuerpo.
- Aparta los tentáculos, cortándolos a la altura de los ojos.
- Descarta la cabeza sin los tentáculos y las vísceras.
- Con la mano, retira la boca (parte dura) que queda entre los
tentáculos y lávalo.
- Busca un cartílago largo que se encuentra dentro del cuerpo, tira
y extráelo.
- Da vuelta el cuerpo para limpiarlo bien y retira todo lo que pueda
tener.
- Lava y corta los calamares en rodajas de unos 2 o 3cm.
- Escúrrelos y pásalos por harina.
- Fríelos en abundante aceite caliente.
- Una vez doraditos y crujientes ponlos en papel secante y
espolvorea un poco de sal por encima.
- Así están muy ricos también pero sino puedes acompañarlos con
un ali-oli.
- Introduce en un vaso batidor el diente de ajo picado, el huevo,
una pizca de sal, un chorro de aceite y un chorrito de vinagre.
- Introduce la batidora hasta el fondo y empieza a batir sin mover
la batidora.
- Cuando empiece a emulsionar mueve el brazo de batidora
suavemente arriba y abajo hasta que quede bien homogéneo.
- Servimos calentito con unas aceitunas y una cerveza bien fría.
Nosotros en esta ocasión nos decidimos por una Cerveza artesana bien fría Ginger Pale Ale, que no nos decepcionó. Su color y espuma duradera la hacen muy atractiva. Fué el acompañamiento perfecto para nuestra cena de picoteo.
Gamus se elabora sin pasteurizar ni filtrar. El método de decocción para la extracción de los azúcares de la malta le confiere sutiles notas a cereal; el amargor es aportado por flores de excelentes variedades de lúpulo. La segunda fermentación en botella le confiere una carbonatación natural.
Buen provecho a todos!
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