Siempre me ha encantado cocinar, pero también me ha faltado el tiempo necesario. En mi vida anterior (tuve una vida anterior de informático) trabajaba en una consultora y no disponía de más de 1 hora y media para preparar las 3 comidas del día. Pero no me resigné a preparar mis platos macrobióticos, así que después de meses de pruebas acabé organizándome súper bien. Hoy te doy estos 7 tips para ahorrar tiempo en la cocina que forman parte de los más de 50 que damos en nuestro taller de 15 platos en dos horas que hacemos en la escuela:
Disponer de buenos ingredientes en la despensa. Si no tienes ingredientes en tu despensa que se cocinen rápido, será más difícil el día que no tengas nada listo con antelación que te entren las ganas de pedir una pizza. Mis básicos son: quínoa, mijo, cuscús, pasta integral, lenteja roja, y en la nevera algún tofu o tempeh o seitán. Después ya tengo lo que tarda más en cocinar y que voy preparando como comento en el consejo 4.
Tener claro desde el principio lo que vas a cocinar. Si vas a hacer una receta, póntela a la vista, saca todo lo necesario y a la carga!! Si es algo que ya conoces o vas a hacer varias cosas, hazte una imagen mental de lo que vas a necesitar para tenerlo todo a mano. Puede ser que empieces con una idea y acabes con algo completamente distinto, y eso hace que pierdas tiempo también.
Lo que más tarda va primero. Si vas a preparar varias cosas, empieza por la que tarde más, si no vas a comer 3 horas después. Las sopas, guisos, platos de horno,… son lo primero que debes ir avanzando y las cocciones cortas, en un momento y al final.
Todos los fuegos en marcha. Un buen síntoma de que estás planificando correctamente es que tienes el máximo número de fuegos en marcha. Si tienes 4 recetas que hacer y un solo fuego está en marcha algo me dice que no te organizas convenientemente, revisa el orden que has elegido y mira cómo lo podrías haber mejorado.
Cocina para varios días. Cuando no cocinas el mismo día, el Ki se pierde y toda la esencia de la frescura del momento te la pierdes…. sí, pero entre eso e irte a comer una hamburguesa vegana guarra porque no puedes comer fresco pues sinceramente prefiero renunciar “un poquito” a la super frescura. Cereales y legumbres aguantan mucho en la nevera, las verduras cocinadas no más de 2 o 3 días. Puedes preparar una ensalada la noche anterior y comerla el día siguiente, busca algún día a la semana que tengas más tiempo para hacer cocciones al momento de las verduras, mientras tanto empieza a cocinar y a comer sano!! Guarda todas tus preparaciones en fiambreras de cristal bien tapaditas.
Menos ollas, menos que fregar. Es que los macrobióticos cuando os ponéis a cocinar dejáis la pila llena de cacharros!! Cuántas veces he oído esto…. y así es, jajajaja. Con el tiempo he aprendido a ahorrar espacio. Te doy un tip muy bueno, usa un colador para cocinar al vapor. En una olla en la que cocines pon el colador con la verdura para calentar y tapa unos minutos, ya te has ahorrado una olla.
Preparar snacks. Hay días que no tienes hambre como para hacer una comida completa, sobre todo si has salido fuera. Tener a manos snacks como pastel de mijo o barritas de semillas endulzadas con sirope de arroz es una buena solución para compensar y crear comidas ligeras.
Espero que te hayan resultado interesantes, ¿qué trucos utilizas tú? Me gustaría que lo compartieras en comentarios. Y si quieres conocer más recuerda que puedes venir presencialmente u onlinemente a ESMACA y aprender muchas más técnicas y trucos en nuestro taller 15 platos en dos horas.