Buenos días, ¿qué tal ha ido la semana?
La mía de nuevo bastante caótica, pero por lo menos ya me estoy acostumbrando al ritmo y por lo menos entre semana no estoy tan cansada aunque el sábado por la noche estaba tan cansada que me quedé dormida en el sofá a las diez de la noche. Soy toda una juerguista.
Aunque tengo que reconocer que el haber ido el viernes de concierto después de estar todo el día en clase y luego en la tienda tiene algo que ver. Pero no me podía perder el concierto de Love of Lesbian después de tantos años intentando verlos. Si os gusta el grupo y tenéis oportunidad de verlos en directo no lo dudéis porque merece mucho la pena, tienen un directo brutal y eso que uno de ellos estaba con fiebre. No sé si tengo muy buena suerte o gafo a los grupos a los que voy a ver, en el puente fui a otro concierto y el de la batería tenía el pie jodido e iba con muletas y aunque dijeron que a lo mejor no podían dar el concierto completo consiguieron hacerlo.
La receta que os traigo hoy es de clase aunque ya la conocía ya que mi abuela suele tener siempre coquitos cuando vamos a verla aunque como también tiene yemas nunca les he hecho mucho caso, me gusta el coco, pero tampoco me apasiona. Esta receta me tocó hacerla en clase a mi sola, aunque aquí os he puesto un cuarto de lo que realmente hice. En clase hice dos versiones, una con coco rallado y otra pasando el coco rallado por la thermomix para que quedara más fino. Yo en casa los hice con coco rallado sin más y así cuesta un poco más darles forma porque el coco no se hidrata tanto y se desmiga más al hacer bolitas, pero visualmente me gustan mucho más así, más rústicos y además es como siempre los ha hecho mi abuela. Ella como los hace a la vez que las yemas los hace sólo con claras y le quedan más blanquitos, yo los hice con huevo entero y la verdad es que tampoco vi mucha diferencia.
Ingredientes (15 unidades)
150 g de coco rallado
75 g de azúcar
1 huevo
Precalentamos el horno a 160º.
Mezclamos el huevo con el azúcar.
Añadimos el coco rallado poco a poco.
Mezclamos o amasamos con las manos hasta tener una masa homogénea.
Hacemos bolitas más o menos iguales y apretamos con tres dedos para hacerles una punta.
Dejamos reposar 15-20 minutos antes de meter al horno.
Horneamos 15 minutos.
Feliz semana :)