Y casi sin darme cuenta ha llegado la primavera, una primavera que será distinta a las vividas en los últimos 10 años, y es que esta la pasaré por entero en París. Y qué mejor que estar en Francia, en primavera y disfrutar de estas crêpes de café con leche Dolce Gusto.
Soleil de la Chandeleur annonce printemps, fleurs et bonheur (el sol de la Candelaria anuncia primavera, flores y felicidad), eso dice el dicho Francés. Pues ya que ese día de la Candelaria no tomé crêpes, quiero que mi primer fin de semana en mi nuevo destino, me traiga eso: flores y felicidad, y eso que asumo que este traslado no va a ser fácil.
No hay nada mejor que la primavera, un estallido de vida, de color, de luz y desde luego no se me ocurre mejor lugar en el mundo que este para vivir mi particular printemps à Paris. Las calles se llenan de flores, hay una colección infinita, sobre todo en las llamadas Villes fleuries.
En mi pequeño pueblito al sur de París, Sceaux, cada rotonda y pequeño espacio verde está lleno de narcisos, tulipanes, jacintos, precioso.
Mi primera receta desde Francia, tenían sí o sí que ser, crêpes, y mira que he probado crêpes en mi vida, pero nunca los había probado de café con leche, como relleno, una crema pastelera de café con leche, suave y con un sutil toque a café que, si sois muy cafeteros, creo que os va a encantar.
En mi maleta se han venido, además de muchas ilusiones, mi ropa, mis libros, mi ordenador y mi cafetera Dolce Gusto, el único electrodoméstico que me he traído, al menos de momento, porque tampoco sé cuanto tiempo estaré en Île de France, ni como se va a desarrollar el futuro. Además, mi cafetera Eclipse Dolce Gusto es preciosa. Cuando le das al encendido y ves como se desliza, y se abre sola, es casi magia, alucinante.
No puedo vivir sin café, ayer tras 11 horas de viaje, agradecí tanto levantarme y y tener mi Dolce Gusto, no sé que tiene el café pero hace casa. Ha sido tomarlo, mirar esa primavera que entraba por la ventana, aquí, hace bueno, hoy.
Lo bueno es que Dolce gusto, tiene tantas variedades que las podemos disfrutar en varios momentos del día ¡Y me puedo hacer chocolates calientes para cuando me dé la morriña!. Y para que Fran no tenga que trasladar todos sus bártulos teteros, que no son pocos, cada fin de semana, pues tendremos también las cápsulas de té listas, la variedad Chai Latte es deliciosa.
Ya estoy casi instalado, me queda concretar horarios y algún que otro papeleo, así que tendréis que disculpar mi poca regularidad para con el blog. De momento estos crêpes de café con leche (o como diré a partir de ahora un grand crème) inspirados en la primavera que me espera, son mi propuesta para mi primer desayuno desde Francia.
Café que despierte mis sentidos y me abra a todo lo que tengo que vivir, y crêpes como símbolo del nuevo lugar donde me tocará hacerlo.
Aún no sé cuanto tiempo estaré por la capital del Sena, wow, todo un mundo nuevo me espera, es tan estimulante.
No quiero decir Adiós, porque sé que no es un Adiós, es un Au revoir (hasta la vista) e intentaré recolocarme lo más rápido posible.
Antes de empezar con la receta os digo que acompañan a estas crêpes unas magdalenas de café con leche que ya os mostré, y que son fabulosas, y muy sencillas, por si os animáis a hacer lo que he querido llamar mi #CreativeBreakfast cafetero con NESCAFÉ Dolce Gusto. Con algo de fruta y con un zumo de naranja os hará sentir como aunténticos reyes. No olvidéis disfrutar de la época más bella del año.
Tiempo Total: 40M
Dificultad:
Comensales: 2-4 personas
Ingredientes
Para la crema de café
250 ml de Cápsulas Capuccino Light
100 gr de azúcar
Canela en polvo al gusto
2 huevos enteros (o 3 yemas)
10-15 gr de Maizena
Para las crêpes
1 huevo
250 ml de leche
125 gr de harina de repostería
un chorrito de aceite de girasol
una pizca de levadura en polvo (o un chorrito de cerveza)
opcional: esencia de vainilla
Instrucciones: Cómo hacer crêpes de café con leche
En una cacerola mezclamos los huevos (o las yemas) con 50 gr de azúcar y la Maizena. Tenemos que conseguir un mezcla homogénea. Reservamos. Preparamos el café con leche con la cápsula de Cappuccino Light, vertemos un poco en la cacerola y mezclamos. Llevamos al fuego, a temperatura media baja, y comenzamos a remover, luego añadimos el resto del café con leche. No dejamos de remover hasta conseguir que la crema espese. Estará lista cuando haga chup-chup. Pasamos la crema a un recipiente y reservamos. Si no la váis a tapar, no olvidéis filmarla para que no haga costra. Por otro lado, preparamos la masa para las crêpes, basta pongamos todos los ingredientes en un vaso de batidora, y lo mezclamos muy bien. Dejamos reposar unos 30 minutos, si hace calor, en la nevera. Luego, si tenéis crepera mejor, si no en una sartén, hacemos las crêpes. Yo las hago todas de una vez y las voy poniendo en un plato. Rellenamos cada crêpe con la crema de café y doblamos primero por la mitad, y luego otra vez y otra vez. Salen unas 5 con estas cantidades si es en crepera, en sartén seguro que mucho más. Una buena crêpe debe ser lo más fina posible, la dejamos por un lado, y cuando se dore bien, la giramos. Probablemente la primera no salga demasiado bien, pero es normal. Casi siempre se desecha. Si las hacéis en sartén es conveniente que pongáis algo de mantequilla antes de hacer la primera para que no se peguen. Hasta muy pronto amig@s, cuidaos mucho y sed lo más felices posible.
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ha sido publicado originalmente en Cocinando con CatMan. Puedes seguirme también en Twitter, Facebook y Google+.