Para las crêpes necesitaremos:
2 huevos
10 g. de mantequilla
100 g. de harina
1/2 cucharada de anís molido
2,5 g. de sal
25 cl. de leche
3 cl. de agua
Batimos los huevos y fundimos la mantequilla. Tamizamos la harina y añadimos el anís, los huevo y la sal. Añadimos la leche y el agua y mezclamos hasta que esté bien mezclado. Añadimos la mantequilla y mezclamos bien. Dejar reposar a temperatura ambiente unas 2 horas. Mientras esperamos preparamos una crema pastelera, yo la he preparado así:
1/2 l. de leche
Corteza de una mandarina
1 rama de canela
1 huevo
150 g. de azúcar
2 cucharadas de maicena
Ponemos a hervir a fuego lento la leche con la corteza de mandarina y la rama de canela. Cuando empiece a hervir apartamos y lo dejamos enfriar.
Batimos el huevo, el azúcar y la maicena con una batidora de varillas hasta obtener una mezcla homogénea. Mezclamos con la leche ya enfriada y lo llevamos al fuego, removiendo hasta que espese. Metemos en un envase con tapa y lo ponemos a enfriar.
Cuando la masa para los crêpes esté lista removemos y ponemos a calentar una sartén antiadherente. Ponemos mantequilla para que no se pegue y echamos un cazo de masa cuando la sartén esté bien caliente. Cuando veamos que está echa por un lado le damos la vuelta y la tostamos por el otro lado. Colocamos en un plato y preparamos las demás de la misma manera. Cuando estén todas hechas ponemos una crêpe y cubrimos con una buena cantidad de crema, colocamos una crêpe encima, luego otra vez crema y así hasta que quede todo montado uno encima de otro.
Si queremos podemos acompañar con salsa de caramelo o chocolate líquido.