El sándwich croque monsieur es un clásico francés. De hecho, si alguna vez habéis estado en París o vais a estarlo, veréis que rara es la panadería que no tiene uno de estos sándwiches en su mostrador. Lo que más nos gusta de él es que es muy fácil de preparar y le da un giro espectacular a algo tan sencillo como el tradicional sándwich mixto.
¿Qué necesito? (2 unidades)
4 rebanadas de pan de molde
4 lonchas de jamón de york
queso gruyère o emmental rallado
20 gr de mantequilla
20 gr de harina
1 vaso de leche
sal
pimienta
nuez moscada
¿Cómo lo hago?
Comenzamos preparando una bechamel. Derretimos la mantequilla y añadimos la harina de una sola vez e inmediatamente removemos todo con una cuchara de madera hasta obtener una pequeña bolita de masa. Incorporamos la leche poco a poco, previamente calentada, y removemos bien hasta que se vayan integrando ambos ingredientes y obtengamos la textura deseada. Salpimentamos y añadimos un poco de nuez moscada. Reservamos la bechamel.
Untamos las rebanadas de pan con bechamel, colocamos el jamón en el interior y cerramos. Agregamos a la parte superior del sándwich una capa generosa de bechamel y por último, el queso rallado.
Colocamos los sándwich en una bandeja de horno y gratinamos. ¡Et voilà! Servir preferiblemente calientes.
Otra versión de este sándwich es el croque-madame. Para que el Monsieur se convierta en Madame basta con añadirle una pamela, es decir, colocar un huevo frito en la parte superior.