En esta ocasión les propongo la receta de cupcakes de chocolate y limón. Particularmente me gustan más los de limón, pero los chiquillos se vuelven locos por el chocolate y no les agrada mucho lo amargo, así que aquí va la combinación.
INGREDIENTES PARA LOS CUPCAKES: 40 ml de aceite de oliva suave, una cucharada y media de levadura, 80 ml. de mermelada de limón, 150 gr. de azúcar, 120 gr. de harina de repostería, 120 ml. de leche sin lactosa (para los alérgicos a la lactosa, optar por soja, leche de coco, leche de almendras,...), 3 cucharadas de cacao puro sin azúcar, una pizca de sal, ralladura de la piel de un limón (ojo, como siempre les digo, sin la parte blanca que amarga) y una cucharadita de extracto de limón.
ELABORACIÓN: Precalentar el horno a 170ºC, calor arriba y abajo, sin ventilador. Preparar la bandeja de cupcakes con las cápsulas y reservar. Tamizar la harina con la levadura, la ralladura de limón y el cacao en polvo y también reservar en un bol. Mezclar el extracto de limón con la leche. Batir el aceite con el azúcar y la mermelada de limón hasta que todo este bien incorporado. Acto seguido, añadir la mitad de la harina y mezclar bien, poner la mitad de la leche y volver a mezclar. Repetiremos este paso una vez más con la harina y la leche restantes. Ojo, no sobre batir.
Si quieren hacerlo en thermomix, pueden, siguiendo los pasos indicados y siempre mezclando unos 20-30 segundos (fijarse por si necesitara un poco más de tiempo o velocidad para incorporarse) a velocidad 2 como mucho para que se nos estropee. Colocar la mezcla en las cápsulas, ayudándonos de una cuchara o un saca bolas de helados, que va muy bien, y los llenamos sólo 2/3. Metemos en el horno entre 20-25 minutos, dependiendo de cada horno (no abrir hasta que transcurra todo el tiempo). Para comprobar que están hechos, pinchamos con un palillo, por ejemplo. Habitualmente se dice que éste debe salir limpio, yo prefiero que quede un poquito manchado, mínimamente, para que con el calor se termine de hacer una vez lo saquemos del horno. Si sale manchado, no un poco, sino bastante, los dejaremos unos 5 minutos más y comprobaremos. A continuación, a reposar unos 5 minutos, no más porque si no con el vapor podrían despegarse las cápsulas, y después los pasamos a una rejilla para que se enfríen unas 5 horas como mínimo antes de guardarlos o de decorarlos. Podremos conservar los cupcakes en un recipiente hermético durante unos 3 días. No meterlos en la nevera porque se pondrán duros y secos.
INGREDIENTES BUTTERCREAM: 110 gr. de Crisco a temperatura ambiente, 550 gr. de azúcar glass tamizado (ojo, debe ser azúcar glass), 50 ml. de leche sin lactosa (de coco, soja,...), 1/2 cucharadita de extracto de limón, una poco de colorante amarillo.
ELABORACIÓN DE LA BUTTERCEAM: poner en un bol la grasa de Crisco a temperatura ambiente, la leche, el extracto de limón y la mitad del azúcar glass tamizada y batir bien hasta mezclarlo. Añadimos el resto del azúcar glass poco a poco y seguimos batiendo unos 5 minutos hasta conseguir una crema suave. Ahora toca en este punto probar para ver si tiene el punto de limón que nos gusta o necesita más. Acto seguido, añadir el colorante amarillo en gel poco a poco hasta obtener el tono deseado. Se puede conservar en la nevera y en un recipiente hermético durante 1 semana. ¡Ah, la buttercream se puede hacer en la thermomix! Poner la mariposa, velocidad 1, durante 1 minuto con la mitad, tal y como indico arriba. Luego iremos incorporando el azúcar de la misma manera y velocidad, otro minuto. Probar y ver si hace falta más esencia de limón e introducir un pelín de colorante, momento en el que mezclaremos unos 4 minutos a velocidad 3 1/2.
PARA DECORAR:necesitamos una manga que puede ser desechable, boquilla 2D o 1M, ponemos la manga recta y a unos centímetros del cupcake. Empezamos de dentro hacia afuera y en el sentido contrario a las agujas del reloj, siempre haciendo la misma presión (todo es cuestión de práctica). Cuando terminemos es muy importante no separar bruscamente, simplemente dejamos de apretar y apartamos suavemente. Listo, así habremos conseguido una rosa de buttercream. No se preocupen si no les ha quedado bien, lo pueden quitar y volver a empezar. Yo suelo ponerla la manga cargada en la nevera antes de usarla, así adquiere más consistencia. Si está muy dura, no hay problema porque a medida que apretemos se va a ir ablandando. Y para dar el toque final, pueden comprar bolitas, adornos de fondant (como los de la foto, por ejemplo), flores, virutas,...Si ya saben usar la manga y las boquillas, esta parte les sobra pues harán maravillas.