Hoy toca receta básica, que a la vez es uno de mis platos favoritos y que a la vez me ha hecho ganarme comentarios por parte de mis compañeros de trabajo franceses de “ah, pero si eso es una ratatouille“. Probablemente. Pero lo llamemos como lo llamemos, la combinación de calabacín, patata, pimiento y tomate, es simplemente deliciosa y tan fácil de hacer…
Una de las cosas que más me gustan de esta receta es que, aunque puede parecer pesado preparar todos los ingredientes por separado, mientras uno se cocina puedo limpiar y cortar el siguiente, así que es muy entretenida. ¡Y la proporción resultado/trabajo es muy alta!
En mi casa lo solemos comer con atún, pero acepta todo tipo de combinaciones, como guarnición y como plato único. Y como ahora convivo con un hater del pescado, hemos tenido que modificar la receta un poco. Aquí comparto los ingredientes básicos y luego un extra donde os enseño cómo la tuneamos la última vez.
Ingredientes (para 4-6 personas):
– 1 calabacín
– 1 cebolla
– 1 patata grande o dos medianas
– 1 pimiento rojo
– 1 pimiento verde
– 100 ml de salsa de tomate (como siempre, mejor casera)
Instrucciones:
– cortar todos los ingredientes en trocitos pequeños; las patatas y el calabacín en láminas finas, como para una tortilla
– cocinar uno a uno, mi orden favorito es cebolla, patata, calabacín y pimientos, a fuego medio. A mí me gusta más cocer que freír, aunque lleva algo más de tiempo; para ello, con un poco de aceite en la sartén, añado las verduras, sal abundante y tapo, dejando cocinar durante unos 15 minutos, hasta que estén tiernas
– ir añadiendo cada una de las verduras cocinadas a una olla y tapar mientras preparamos el resto
– una vez terminado, poner la olla a fuego medio y añadir la salsa de tomate, removiendo bien para que todos los ingredientes se mezclen entre sí y con la salsa
Bonus track: Tuneo de sábado noche. O de cualquier noche, vamos, para hacer una cena apañada como plato único.
Ingredientes:
– dos o tres rebanadas de pan
– dos filetes de jamón
Jamón y pan, ¿qué puede salir mal?
Instrucciones:
– cortar el pan en cuadraditos pequeños, espolvorear con sal, ajo en polvo y orégano y dorar ligeramente en una sartén, hasta que esté crujiente
– añadir el jamón cortado en trozos pequeños y saltear unos minutos
– añadir esto a la olla donde tenemos el pisto y mezclar bien; el pan se impregna de la salsa de tomate y verduras y el jamón le da un toquecito salado riquísimo
¡Qué platos tan poco fotogénicos venían con el piso! Creo que necesitamos unos nuevos.
Para terminar, contaros que suelo preparar esta receta en cantidades industriales y luego ir comiendo toda la semana o congelarla. Con estas proporciones suele ser suficiente para 4 personas como plato único o para 6 como guarnición. Y no me puedo ir sin dejaros otro truco: una vez hecho el pisto y pasado a otro recipiente, probad a hacer unas pechugas de pollo en la misma olla donde hemos preparado el pisto. ¡Con extra de salsa de tomate, quedan buenísimas!