Cada vez me gusta más la cocina japonesa: es sana, ligera, y con una forma de tratar los alimentos que potencia mucho los sabores.
Reconozco que aún no puedo con lo crudo "en taco gordo": en carpaccio o en sushi me como todo, pero admito que el sashimi "se me hace bola" como a los niños chicos, ¡imposible!.
Pero no todo es crudo, obviamente, en la cocina de Japón. Y siempre me ha encantado el pollo o el solomillo teriyaki, así que me lancé a la caza y captura de recetas.
Encontré una en "Directo al Paladar" que me pareció muy apetecible, pero.... lamentablemente, tenía un "pequeño" inconveniente: lleva brócoli.
Y, aunque a mí me gusta mucho, aquí el caballero me puede poner el wok de sombrero si le doy brócoli, jajajaja. Ya le he explicado que es sanísimo para los diabéticos, le he contado las numerosísimas propiedades que tiene... ni puñetero caso.
Así que tocaba, para variar, tuneo. ¿Y qué mejor que unos champiñones Portobello?.
Ha sido todo un éxito, ¡no sabéis lo tiernecita que queda la carne!. Se deshace en la boca.
Ahora, mi paso siguiente es hacer yo la salsa teriyaki: tengo ya una recopilación buena de recetas, así que me pondré a ello y ya os contaré.
Es conveniente que utilicéis una carne de calidad, y unos buenos champiñones.
No le pongáis sal: es suficiente con la salsa de soja.
Sin más preámbulos, vamos con el paso a paso...
INGREDIENTES
(Como siempre: 3 personas normales, o 2 comilonas)
500 gramos de solomillo de ternera
100 ml de salsa teriyaki (o "marinada teriyaki")
125 gramos de champiñones Portobello
Aceite de oliva (virgen extra, como está "mandao").
Salsa de soja
Esta es la salsa teriyaki que yo he usado:
PREPARACIÓN:
Limpiamos el solomillo de grasa, y lo cortamos en tacos.
(En este momento, se me venía a la cabeza la imagen de un cocinero japonés, en un restaurante de un hotel en Marbella... Era todo un espectáculo verle trocear las carnes, ¡cómo manejaba el tío los cuchillos!.
Mi cuchillo es japonés, pero yo cortaba con prudencia: si intento imitar al cocinero, me llevo el dedo, jajaja) .
Ponemos la carne a marinar con la salsa teriyaki durante 2 horas.
(Yo la meto en un tupper, lo cierro, y le doy la vuelta para que se reparta bien la salsa. Y lo guardo en la nevera: no me gusta que las carnes anden fuera demasiado tiempo, sobre todo cuando ya hace calorcete)
Pasado ese tiempo, sacamos la carne de la marinada, escurrimos bien, y reservamos la marinada por un lado, y la carne por otro.
Troceamos los champiñones, bien limpios y secos.
Echamos un chorro de aceite en el wok, y salteamos los champiñones unos minutos (tapando el wok al principio).
Y reservamos.
(Si hubieran soltado mucho líquido, secaremos un poco el wok con papel de cocina, porque si no, se cocerá después la carne y no se salteará, que es lo que queremos).
Ahora añadimos otro chorrín de aceite, y salteamos la carne a fuego vivo, no mucho tiempo (prácticamente, vuelta y vuelta).
Y reservamos también.
Ahora vertemos en el wok la salsa teriyaki que sobró, junto con un chorro de salsa de soja. Dejamos reducir a fuego vivo, para que se vaya caramelizando y coja cuerpo la salsa.
Y entonces agregamos la carne y los champiñones, removemos bien, salteamos un minuto-minuto y medio, y servimos.
¡A comer!
Espero que os guste, es un plato delicioso.
Feliz semana a todos.