ara este fin de semana os propongo un bocado dulce bien fácil y rápido de preparar para tomar a media tarde: unas delicias de crujiente pasta filo que envuelven uno de mis manjares dulces preferidos como es el cabello de ángel o dulce de cidra. Sé que muchos de vosotros tenéis en vuestra despensa cidra elaborada de manera artesanal, así que es una ocasión perfecta para disfrutarla de una manera deliciosa.
La calabaza que nos proporciona este delicioso dulce formado de filamentos delgados y ligeramente dorados, es un producto de grandes recursos, ya que también se pueden consumir sus hojas tiernas, las flores y el fruto, tanto tierno como maduro. Las flores de la calabaza se consumen igual que las de calabacín: crudas, fritas, rellenas, salteadas, asadas En México y en otros países americanos se utilizan también como verdura, de manera similar a la fiore di zucca utilizada en la cocina italiana. Las hojas tiernas se pueden consumir en ensalada crudas, escaldadas o salteadas.
Tengo publicadas otras recetas en las que el cabello de ángel es claro protagonista, algunos de los cuáles podéis encontrar en estos enlaces: torta inglesa, rebujaítos de cidra o los tronquitos de cidra y naranja confitada .
Espero que os guste esta receta tan sencilla pero tan deliciosa.
¡Un abrazo y que disfrutéis de un feliz fin de semana!
Ingredientes:
12 hojas de pasta filo
400 gr de cabello de ángel o dulce de cidra
4-5 cucharadas de margarina
Azúcar glas
Canela molida
Almendras fritas
Elaboración:Precalentar el horno a 180ºC.
Poner al fuego un cazo con la margarina y dejar que se diluya por completo. Apartar y dejar templar.
Sacar las hojas de pasta filo y extender sobre la encimera 4 hojas de manera que formen una fila. Pintar con la margarina los bordes que solapen y la superficie superior de cada una.
Colocar encima de las hojas pintadas otra fila igual que la anterior, volviendo a cepillar los bordes de solape con la margarina.
Extender en uno de los bordes de la fila de hojas de pasta filo el cabello de ángel, tal como se puede apreciar en la foto inferior. Enrollar las hojas sobre sí mismas empezando por el borde donde hemos puesto el cabello de ángel, cepillando con margarina el borde final que cierra el rollo.
Cortar con un cuchillo bien afilado o tijeras, porciones de unos 7-8 cm de largo. Poner azúcar glas en un plato y rebozar en ésta los extremos de cada porción cortada para evitar que se salga la cidra durante el horneado.
Poner las porciones en la bandeja del horno o en un recipiente apto y hornear a 180ºC durante 10-12 minutos.
Retiramos del horno una vez que estén bien doradas, dejamos templar un poco y decoramos con azúcar glas, canela molida y las almendras. Están exquisitas así aún templadas, pero ganan en textura cuando se enfrían ya que se vuelven más crujientes.