Y hoy, como tantos otros viernes, cocinamos "a medias" con mi amiga Raquel que hoy nos propone una receta de esas que nos gustan, pensadas para comer en casa y compartirla con la familia: patatas con romero y salsa dip. ¿Os apuntáis a nuestro aperitivo?
Elaboración & Fotos @ Raquel & Deco López García
Sí, porque hoy nos toca un aperitivo con todas las letras, un plato salado tan sencillo y rápido de preparar que a nuestra corresponsal en Alemania de la "sección cocinillas" ¡se le olvidó hacer las fotos del paso a paso! Imaginaos la escena cuando me lo contó... ella toda apurada y yo muerta de la risa. Pero no os preocupéis que, como siempre, a la receta no le falta de nada, con su olvido, Raquel me dió la excusa perfecta para, siguiendo sus instrucciones, preparar un aperitivo de domingo para toda la familia y así poderos contar de primera mano lo rica que está ;)
Como siempre, empezamos con los ingredientes:
- 400 gr de patatas pequeñas con piel
- 1/2 tarrina de queso quark o queso batido
- Unas ramitas de romero (yo no lo he puesto porque no me gusta ;) o hierbas provenzales y perejil
- Un manojo de cebollino
- Pimienta
- Sal marina gorda
- Aceite de oliva
- Agua con gas
L@s que viváis en ciudades grandes os vais a reír, pero aquí en Laredo encontrar el cebollino me costó un paseo por ni más ni menos que ¡cinco supermercados! Y yo que pensaba que con MasterChef, el tema ingredientes variados estaba superado... pero parece que por aquí somos unos clásicos ;)
Pero bueno, ahora sí con todos los ingredientes sobre la mesa, nos ponemos con el paso a paso:
Paso 1. Para empezar, lavamos las patatas, las secamos y las partimos por la mitad. Si no hemos conseguido patatas pequeñas y son un poco más grande, podemos cortarlas en cuatro, o en los trozos pequeños que veamos.
Paso 2. A continuación, encendemos el horno a unos 200ºC y mientras se va calentando, colocamos papel de horno sobre una bandeja y, sobre él, echamos un chorrito de aceite de oliva y sal que repartimos por toda la superficie. Como veis en la foto, yo lo he hecho con un pincel para asegurarme de que nos e quedaba ningún hueco sin untar.
Paso 3. Después, colocamos las patatas sobre la bandeja con la parte cortada hacia abajo. De ese modo las patatas se untarán por ese lado con la mezcla de aceite y sal que hemos extendido antes. Una vez colocadas, añadimos un poco más de aceite y sal por el lado de la piel que ha quedado hacia arriba. En este caso no os fiéis mucho de la foto porque yo me he pasado un pelín con el aceite, para que a vosotr@s no os pase, lo mejor es no poner mucho de entrada y luego ir añadiendo poco a poco.
Paso 4. Por último, espolvoreamos por encima las hojitas de romero - en las fotos de portada y la final que son las de Raquel ;) - o las hierbas provenzales y el perejil como he hecho yo, y metemos la fuente en el horno que ya estará caliente. Una vez dentro del horno las dejamos unos 20 minutos - a 200ºC o 180ºC, como siempre dependerá de vuestro horno -. Aquí, y antes de seguir, un par de consejos. El primero, si sois de los que os gustan las patatas muy doraditas, dejadlas 10 minutos más. El segundo - truco del almendruco del Sr.Padre, que es un gran cocinillas - es que, para que todas las patatas de la fuente se tuesten por igual, lo mejor es que, a los 10 minutos, saquéis la fuente del horno y le deis la vuelta, nunca falla ;)
Paso 5. Y ahí, mientras las patatas se hacen en el horno, nos ponemos con la salsa Dip:
En un bol, ponemos la mitad de la terrina del queso quark (foto 1), le añadimos un chorrito de aceite de oliva (foto 2), salpimentamos (foto 3) y mezclamos todo bien. Si vemos que, después de batirlo, la mezcla nos ha quedado demasiado espesa, podemos añadir un par de cucharaditas de agua con gas - si no tenéis, podéis usar sin gas pero mejor con él ;) -. Por último, cortamos parte del cebollino, reservando un poco para la presentación, y lo mezclamos con la salsa.
Y ya está, cuando tenemos lista nuestra salsa, es hora de sacar las patatas del horno. Para servirlas, podemos optar por hacerlo en una fuente común con un único bol de salsa para compartir, o bien hacerlo en platos individuales con pequeños boles de salsa para dipear. En cualquiera de los dos casos, presentaremos las patatas tanto por la parte de la piel como por la parte cortada, y con el resto de cebollino cortado espolvoreado por encima.
Así de fácil tenemos listas nuestras patatas con romero y salsa dip, un aperitivo perfecto que también puede servirse como acompañamiento para un plato principal de carne por ejemplo ;)
Antes de terminar, una última cosa... aunque a mí me parece que las patatas quedaron bien sabrosas, el salsero de la casa - título que ostenta el Sr.Padre ;) - quiere añadir que para su gusto la salsa es demasiado suave y le falta un poco de picante o un poco de ajo para ser perfecta. Si vosotr@s también sois salseros o, como yo, estáis rodeados... anotaos el detalle, ¿vale? Yo por mi parte se lo comentaré a Raquel, a ver qué opina ella ;)
¿Qué os parece? ¿Os animáis a "dipear" como nosotros?
¡¡FELIZ FIN DE SEMANA!!