Somos aficionados al té desde hace algún tiempo. No solo por sus propiedades y beneficios (antioxidantes, antinflamatorias, vitaminas, minerales, aminoácidos…), sino también por la gran variedad de tipos que existen actualmente, por lo que seguro que puedes encontrar aquel cuyo aroma y sabor te conquiste.
Tipos de té:
Las variedades van en función del tratamiento dado a las hojas de la planta (Camelia Sinensis). En función del procesamiento de estas podremos obtener tés con mayor aroma e intensidad, y otros más suaves y afrutados.
Principalmente distinguimos:
Té verde
Es el más popular en los países asiáticos, y al que se suelen atribuir mayores propiedades beneficiosas: reducción del estrés y enfermedades cardiovasculares, mejora de la memoria, adelgazante…. Y es el que mayor número de antioxidantes presenta. De sabor suave y bajo contenido en teína.
Té matcha
Nuestro favorito. Básicamente, es la hoja entera machacada y hecha un polvo fino, por lo que estás consumiendo las hojas en su totalidad, lo cual multiplica enormemente los beneficios y su valor nutricional. Originario de China, pero popularizado por monjes Zen de Japón, se comenta que uno de los factores de la longevidad de los japoneses es debido al consumo de matcha. Previene el envejecimiento y ayuda a la pérdida de peso.
¿Quién le dice que no a un matcha latte cremoso?
Té rojo
De color rojito y sabor potente, requiere un proceso de fermentación largo, cuanto más tiempo mejor. Destaca por sus propiedades depurativas, ya que facilita la digestión, y de pérdida de peso, además de la gran cantidad de vitaminas que contiene.
Té negro
De oxidación intensa, carácter fuerte, y el de mayor concentración de teína (se recomienda no abusar), fruto de su elaboración. Es el más consumido en Reino Unido (con leche y azúcar).
Té blanco
Procesamiento mínimo, de ahí su color claro, dada la escasa oxidación de las hojas. Su sabor es muy suave, y la concentración de teína es mínima. Destaca en la prevención de enfermedades cardiovasculares y la diabetes.
Infusiones
No son tés propiamente, ya que no se preparan a partir de la planta (camelia sinensis) sino de otras. La manzanilla, la valeriana, la salvia… son infusiones con grandes propiedades, pero no entran en la categoría de tés (simplemente una aclaración).
Y ahora, ¡os damos algunos consejos a la hora de preparar el té!
Aunque cada variedad tiene una temperatura adecuada (suele estar entre 65º para un té blanco, y no más de 100 para el té negro), y el tiempo de infusionado también (un par de minutos para lo más delicados, y hasta 3 para los más fuertes), existen una serie de normas básicas a respetar, sino queremos maltratarlo:
Prepararlo en una tetera y servirlo en tazas.
No llegar a ebullición.
Emplear los utensilios adecuados para el té y sus variedades.
Si se emplean bolsitas, no retorcerlas.
Emplear agua de baja dureza.
Respetar temperatura y tiempo de infusionado.
No agregar azúcar y/o leche en exceso.
Y hasta aquí nuestro post. Esperamos que os hayamos animado a los que no sois fans del té y sus variedades, y ampliaros info a los que sí. Hoy en día existen numerosas tiendas de tés de calidad, pero nuestra recomendación es Aromas de Té (www.aromasdete.com), no solo por la calidadde sus tés (también sus cafés e infusiones), sino también por la facilidad de compra, a través de e-commerce.
¡Nos leemos!