Pero antes os hablaré un poco de uno de los ingredientes principales: Agar-Agar..
El agar-agar es la principal alternativa vegetariana y natural a la gelatina animal o a la cola de pescado. Presenta un poder de gelificación 10 veces mayor que la gelatina de origen animal y 30 veces superior que la cola de pescado, y además el resultado de la gelatina es distinto, ya que la gelatina queda más firme si se usar agar. Otra de las diferencias que tiene con estas otras gelatinas, es que el agar-agar permite ser calentado, conservando su textura y consistencia al contrario que las primeras que pierden sus propiedades a más de 30ºC.
Debido a esta propiedad, se utiliza en cocina para espesar y gelificar alimentos, ya sean dulces o salados, sin añadir ningún tipo de sabor, color u olor a las preparaciones.
La palabra agar viene del malayo agar-agar, que significa jalea o gelatina, y es una sustancia presente en algunos vegetales marinos, extraído principalmente de las algas rojas Gelidium. Por su alta capacidad para absorber agua, se hincha al contacto con ésta, y produce un mucílago viscoso que al hervir forma una gelatina muy firme.
Si el agar-agar ya resulta interesante en su uso culinario, no son menos interesantes sus propiedades nutritivas, ya que es un auténtico aliado de la salud, al tener un aporte calórico próximo a cero y un alto contenido de fibra soluble. Actúa como regulador intestinal y coadyuvante en dietas de adelgazamiento por su efecto saciante. Además, popularmente se asocia con la longevidad y se consume ante disfunciones gástricas y dolores articulares. Es rico en minerales como calcio, magnesio, fósforo y hierro.
Para los vegetarianos es una alternativa a las gelatinas animales, al ser un producto de origen vegetal.
Se puede presentar en tres texturas: En fibras, granulado ó en copos. En esta ocasión he usado en fibras para la ensalada:
Vamos con la receta:
Ingredientes:
Lechuga Iceberg
Zanahorias
Jamón cocido
Agar agar
Para el aliño:
60 c.c. de vinagre de vino blanco o de manzana
50 grs. de azúcar
1 cucharada de aceite de girasol
1/4 de cucharadita de sal
Instrucciones:
Ponemos unas cuantas hebras de Agar-Agar a remojo durante unas horas, escurrimos bien, reservamos.
Cortamos en juliana la lechuga Iceberg, zanahoria y jamón cocido, procuramos que tengan el mismo tamaño.
Colocamos todo en una ensaladera, rematamos con el Agar-Agar.
Preparamos la salsa mezclando todos los ingredientes con la batidora hasta hacer una mezcla blanquecina, ponemos en un salsera.
Acompañamos con la ensalada para que cada cual se sirva a su gusto.
Una ensalada riquísima, llena de nutrientes y con poquísimas calorías, os animáis?